El Ayuntamiento de Vitoria crea un registro de uniones extramaritales y homosexuales
La inscripción servirá en procesos judiciales, pensiones y como prueba de convivencia
El Ayuntamiento de Vitoria ha sido el primero en crear un registro voluntario de uniones civiles, heterosexuales y homosexuales. El objetivo es "asegurar la protección social, económica y jurídica de las parejas formadas al margen del matrimonio". El registro, que no afecta a materias fiscales, tendrá validez de prueba en procesos judiciales y puede favorecer en casospatrimoniales, derechos hereditarios y también pensiones y arrendamientos. El alcalde del PNV, José Ángel Cuerda, calificó su propio decreto como un símbolo que "transgrede la moral establecida"
El Registro Municipal de Uniones Civiles tiene carácter administrativo, servirá para registrar tanto las uniones como las rupturas y permitirá la inclusión "mediante transcripción literal de los contratos reguladores de las relaciones personales y patrimoniales entre los miembros de esas uniones".Las únicas limitaciones son la mayoría de edad y la cosanguinidad entre sí en los grados habituales. Uno de los dos miembros de la pareja tendrá que estar empadronado en Vitoria y la inscripción se hará a petición de ambos. El decreto de alcaldía por el que se crea el registro público especifica que la publicidad del mismo queda limitada "exclusivamente" a los certificados que pidan los miembros de la pareja o los jueces y Tribunales de Justicia. Todo ello será gratuito.
La coordinadora de homosexuales del País Vasco, EHGAM, consideró ayer muy positiva la creación del registro, adelantó que va a solicitar su creación en los dos ayuntamientos restantes de las provincias vascas y propondrá el tema para debate en la reunión que todas las coordinadoras estatales de homosexuales -COOFLHEE- celebran hoy y mañana en Barcelona. "Es bastante positivo" declaró ayer un portavoz de EHGAM, "y nos puede reportar bastantes beneficios; de entrada, en temas judiciales".
Funcionarios municipales
Los efectos prácticos de la iniciativa están limitados por la definición de pareja que hace el Código Civil y por todo el tejido legislativo creado a su alrededor. Esto les impedirá acceder a las ventajas en materia fiscal, pero al existir un registro público que acredite la convivencia sentimental, se abre una nueva vía en materia judicial, en campos tan importantes como arrendamientos urbanos, reclamaciones a la Seguridad Social, relaciones patrimoniales, cuentas corrientes, créditos, derechos hereditarios y en la situación posterior a la muerte de uno de los miembros de la pareja, ante el cobro de indemnizaciones o seguros. Al probar la relación, garantiza además la exención de pena en los casos en los que uno de los miembros de la pareja encubra a otro en procesos criminales.
En Vitoria las parejas homosexuales y heterosexuales de los trabajadores del Ayuntamiento disfrutarán de los mismos beneficios de tipo social que los matrimonios. "Es importante", declaró ayer el abogado Ildefonso Sáenz Tabueña, "porque se va a convertir en un certificado para todos los jueces".
Para el Diputado de Hacienda, Roberto San Ildefonso, se trata de una declaración de intenciones sin repercusiones fiscales. "Habría que reformar el código Civil para que Hacienda acepte esos planteamientos", declaró ayer.
El alcalde de Vitoria, José Ángel Cuerda, entiende que la principal virtualidad de la iniciativa -"todavía simbólica"- es dar el primer paso para conseguir la "dignidad e igualdad" de todas las personas, "independientemente de sus inclinaciones sexuales", y el cambio de una legislación que es el fiel reflejo de los valores predominantes. "Unos valores de carácter moral y religioso muy determinados que inciden en una legislación que hay que cambiar", declaró ayer Cuerda.
Norma transgresora
El alcalde de Vitoria, que ocupa este puesto desde la llegada de la democracia, ha sido el precursor del salario de pobreza y creó la primera oficina municipal de objección de conciencia.
"El decreto", dijo ayer, "es una norma transgresora porque irrumpe en la moral establecida para avanzar en la humanización de esa moral". "Dudo mucho", dijo ayer Cuerda, "de que haya parejas que se inscriban de forma inmediata. Quizás esperen a ver cómo se desarrollan las cosas. Sin embargo, me interesan mucho más los efectos expansivos que pueda tener el registro y el debate que pueda generar a continuación".
Cuerda, que es abogado de profesión, clausuró recientemente un curso sobre la regulación jurídica de la relación no matrimonial y calificó su decreto, que será publicado la próxima semana en el Boletín Oficial de la Provincia, como la conclusión de un trabajo extenso que él mismo ha realizado sobre este tema".
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