Fracasa la Conferencia para el Consenso Nacional en Argelia, aunque el régimen dice que habrá diálogo

La Conferencia para el Consenso Nacional, en el seno de la que el Gobierno y la oposición deberían haber negociado la salida a la crisis argelina, ha fracasado, como consecuencia del boicoteo decretado por la mayoría de los partidos, incluido el Frente Islámico de Salvación (FIS). El propio presidente del Alto Comité de Estado, Alí Kafi, lo reconoció así en el acto de apertura de la reunión, efectuado ayer en Argel. Sin embargo, Alí Kafi aseguró que continuará el proceso de diálogo, ya que se trata de la forma "más pacífica para erradicar la crisis" y "vencer la violencia".

Los integristas del FIS, al igual que la mayoría de los partidos políticos de Argelia, no acudieron a la cita en el Club de los Pinos, sito a 30 kilómetros de la capital de Argel, que durante dos días es sede de la Conferencia del Consenso Nacional.La asistencia de los delegados del FIS había sido anunciada a título de rumor en las horas previas y recogida por algunos periódicos, que ayer llegaron hasta a publicar los nombres de los representantes supuestamente enviados por la dirección de la organización. Entre los pretendidos asistentes se encontraba Abdelkader Hachani, el artífice del triunfo electoral de la principal formación integrista del país. Pero las noticias publicadas precipitadamente por la prensa se vieron desmentidas por los hechos, sin que trascendieran exactamente las razones del cambio. [Rabah Kebir, portavoz del FIS en el exilio, declaró al rotativo árabe Sharq al Ausat que "esta conferencia sólo sirve para ganar tiempo y carece de toda credibilidad, por lo que no interesa al FIS", informa Efe desde Rabat. Kebir defendió el uso de la violencia "contra la injusticia causada por el régimen" y reconoció que el objetivo que se pretende alcanzar con ella es "producir una escisión dentro del poder"].

La delegación del FIS que nunca llegó al Palacio de los Congresos era el fruto de un supuesto pacto tejido entre el Gobierno y los dirigentes integristas en la misma noche del lunes, pocas horas antes de la apertura de la conferencia. Sin embargo, este supuesto pacto se rompió por la mañana con lo que el FIS se sumaba al bloque de rechazo configurado por casi todas las fuerzas políticas argelinas. Además, las escasas formaciones que acudieron al Club de los Pinos amenazaron con abandonar la sesión por considerar que lo que allí se daba era un "monólogo del poder y no un diálogo".

Si asistieron a la conferencia representantes de las asociaciones cívicas y sociales de Argelia, entre los que se encontraban numerosos funcionarios, así como una veintena de altos mandos del Ejército, que ocupaban un lugar no preferente, mezclados entre los asistentes, aunque no lejos de los miembros del Alto Consejo de Estado (ACE) y del Gobierno.

Los trabajos de esta reunión se abrieron bajo la presidencia de los ocho miembros de la Comisión Nacional del Diálogo, formada por cinco civiles y tres militares, quienes durante cerca de cuatro meses han intentado establecer un pacto nacional en Argelia. Pero el plato fuerte de la sesión estuvo protagonizado por el presidente del ACE, Alí Kafi, quien leyó un largo discurso en el que hizo un balance del trabajo realizado durante el mandato del comité, que expira el próximo 31 de enero.

Alí Kafi acusó a los partidos de la oposición de "conducta antidemocrática" y de haber eludido la cita, "tomando posiciones negativas con respecto al diálogo, llegando incluso a boicotear la conferencia". Aseguró que los partidos trataban de "hacer perder a la nación una ocasión histórica y excepcional, haciendo prevalecer los cálculos partidistas mezquinos e incluso personales, en detrimento de los intereses de la nación".

Reinstauración democrática

Alí Kafi abogó por la reinstauración del proceso democrático, pero lo condicionó, entre otras cosas, al fin de la violencia y a que se permita la construcción de un Estado fuerte y moderno. También aludió a la necesidad de salir de la crisis económica, de romper con los métodos antiguos y de hacer resurgir a Argelia en el escenario internacional.

Este discurso político de Alí Kafi coincide, en sus líneas generales, con el pronunciado por él mismo en enero de 1992, cuando, en el mismo escenario y ante las fuerzas políticas del país, propugnó también la creación de un Estado fuerte y la erradicación del terrorismo.

La conferencia deberá discutir y elaborar en los próximos días una plataforma de trabajo en la que se contemplen las grandes tareas de la próxima presidencia y del Gobierno de la república que deberá regir los destinos de Argelia durante la transición. Los trabajos del plenario se efectuarán por comisiones y culminarán esta tarde con unas conclusiones programáticas.