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Fábula del transporte, el casco histórico y el bosque

Javier Casqueiro

Joaquín Leguina ha demostrado una especial predilección por los transportes públicos y por sus responsables políticos. Tiene una estrecha relación con su consejero de Transportes, ayer dedicó a este asunto muchas hojas de su discurso leído, y desayuna frecuentemente con el ministro de Obras Públicas, José Borrell.Leguina piensa que las inversiones en transportes "son las que mejor se rentabilizan socialmente". Pero a Borrell y a Pedro Solbes, ministro de Economía, les tiene últimamente en el punto de mira. Ayer les recordó numerosos convenios pendientes: renovación del II Plan Felipe para la construcción de más carreteras y autovías; desarrollo de la red del metro y trenes de cercanías, de la ciudad aeroportuaria o de su sueño eterno, la Operación Campamento (trasladar ministerios a las afueras de la ciudad).

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Leguina se ha empeñado también en la rehabilitación de las 10.000 "infraviviendas" del casco histórico de Madrid. En este punto, que ya ha conversado con Felipe González, le echó un capote a Borrell y otro al alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, del PP. También aludió al alcalde por olvidar su cuota de inversiones en los barrios del sur.

En esa zona quiere Leguina que se centre la Comunidad en tareas de reforestación. Uno de los escasos proyectos que reveló ayer y que no había comunicado ya el año pasado tiene que ver con la replantación de 175.000 hectáreas para, duplicar la superficie arbórea. actual, pero para un plazo de 40 años.

Por lo demás, Leguina reeditó su apoyo a la cooperativa en crisis PSV, al Consorcio para el Realojamiento (con 400 millones nuevos, pero insuficientes), a la esperada desde hace cuatro años Ley del Suelo, al Plan de Estrategia Territorial (en estudio), al tren de cercanías hasta Alcobendas (sin proyecto), a la paralizada presa de Matallana, a la gran depuradora del sur, a las residencias de ancianos, a la Unión Europea y a los mejillones que comió en Bruselas, que en el futuro, dijo, serán gallegos.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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