Alemania impide a la familia de Pablo Escobar la entrada en el país
El Ministerio del Interior alemán impidió la entrada en el país a la familia de Pablo Escobar. Anoche, los familiares del narcotraficante colombiano, cuya identidad no fue confirmada por las autoridades, se encontraban en dependencias de la Policía de Protección de Fronteras, en la zona de tránsito del aeropuerto de Francfórt. La de Pablo Escobar Gaviria es una familia de origen plebeyo, que en una década logró acumular una de las 15 fortunas más grandes del mundo y notoriedad reservada a la de la jet-set internacional, aunque casi siempre destacaba en las páginas judiciales.
Con todo su dinero, el capo, que el 1 de diciembre cumplirá 44 años y que hace 16 meses huye del asedio de 1.500 policías y soldados élite, apoyados por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), no ha conseguido un poco de tranquilidad para su esposa, María Victoria Enao, y sus hijos menores de edad, Juan Pablo y Manuela, de 17 y nueve años. Ante el asedio del grupo paramilitar Pepes (Perseguidos por Pablo Escobar), que durante el último año atacó más de 20 veces a estos y a otros parientes, el sábado optaron por el éxodo.Las cuatro personas, que según la policía alemana pertenecen "al entorno de Pablo Escobar", llegaron a Francfprt a las 13.15 (hora local) en un avión de la compañía Lufthansa que fue desviado a una pista de aparcamiento a tres kilómetros de la terminal, informa desde Bonn Lino Ventosinos. Tras identificar a todos los pasajeros a bordo del aparato, la Policía de Fronteras no permitió a los familiares de Escobar que desembarcasen con el resto de los viajeros y les trasladó a sus dependencias para ser interrogados.
Cien policías
Horas antes, escoltados por 100 policías, 20 automóviles y dos helicópteros, la esposa y los hijos de Escobar salieron de su apartamento del elegante barrio El Poblado, de Medellín, hasta el aeropuerto Córdoba, donde un avión de Avianca los trasladó a Bogotá. Tras seis horas de espera en El Dorado, en la capital colombiana, los tres abordaron un avión de Lufthansa con rumbo a Francfort. No está claro en que momento se les unió la cuarta persona, novia de Juan Pablo Escobar.
"Yo traté de presionar en favor de la entrega de Escobar retirando la protección a su familia, pero ellos decidieron por su cuenta y riesgo salir del país", explicó el fiscal Gustavo de Greiff, al informar que los 50 agentes que durante más de tres meses custodiaron a la familia se destinaron a "otras misiones".
"A mi forma de ver, las autoridades alemanas pueden fácilmente devolver a los Escobar Enao o impedirles su ingreso a ese país", añadió el fiscal en referencia a un supuesto acuerdo entre ambos Gobiernos acerca de que la protección a la mujer e hijos del fugitivo se supeditaba a la entrega del narcotraficante a las autoridades colombianas.
Un portavoz de la policía de fronteras del aeropuerto de Francfort precisó ayer que la familia de Pablo Escobar no obtendrá permiso de entrada. El Ministerio del Interior determinó que la familia del capo puede decidir, en el plazo más breve posible, el país al que deseen ser trasladados desde Francfort.
El 14 de octubre, en un allanamiento policial a una casa campestre del valle de Aburrá, se hallaron cartas de María Victoria a su esposo en las que le cuenta que Alemania y el Reino Unido ofrecieron acogerlos. "Pero la única condición es que tú te entregues", precisaba la misiva.
Las cartas, que alternan palabras afectuosas, consultas domésticas y nostalgia, también denotan falta de dinero en efectivo para asumir la alimentación de los 50 guardias destinados por la fiscalía, y una velada presión para que se rinda.
Pasajeros que tuvieron acceso a la familia durante el vuelo aseguran que la mujer y los hijos de Escobar viajan únicamente con 6.000 dólares (840.000 pesetas).
El que los Escobar Enao optaran por Alemania se explica porque este país no exige visado a los colombianos y acogió a Nicolás Escobar Urquijo, hijo de Roberto Escobar Gaviria, alias Osito, y segundo de Pablo Escobar en la jerarquía del cartel de Medellín, ahora recluído con otros ocho lugartenientes en la cárcel de Itaguí, donde presumiblemente se entregaría por segunda vez el jefe narcotraficante.
Nicolás Escobar, su esposa, un bebé, su madre y otros tres parientes, llegaron a Alemania en julio como último punto de un azaroso itinerario desde que Chile los expulsó y no lograron permisos de entrada en Argentina, Perú, Panamá y Costa Rica.
Nueva rendición
La proximidad de una nueva rendición de Escobar -quien huyó el 22 de julio de 1992 de la cárcel La Catedral, de Envigado, un año después de haberse entregado a la justicia a cambio de rebajas de penas- fue motivo de especulaciones periodísticas durante el fin de semana.
El 19 de febrero, cuando Juan Pablo y Manuela intentaron salir del país con visados estadounidenses legales y vigentes, las autoridades colombianas los detuvieron porque no tenían permiso, autentificado en notaría, de su padre, requisito para que un menor salga al extranjero. El sábado, el Instituto de Bienestar Familiar autorizó la salida de los dos a Alemania sólo con el permiso de la madre, ante la evidente desaparición de su padre, por el que las autoridades han ofrecido 10 millones de dólares (1.400 millones de pesetas) de recompensa.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.