Gesto por la Paz y los 'cascos azules' reciben el Premio Príncipe de Asturias

La iniciativa civil y ciudadana a favor de la paz y de la convivencia sinderramamientos de sangre en el País Vasco, del que es expresión la Coordinadora Gesto por la Paz, y el esfuerzo humanitario internacional en la antigua Yugoslavia para poner fin a la guerra, encarnado en los soldados de las Naciones Unidas allí desplazados, convirtieron ayer el acto de entrega de los Premios Príncíp e de Asturias 1993 en un sentido llamamiento a la concordia.

El Príncipe de Asturias, don Felipe de Borbón, que presidió el acto, unió su voz "a los que claman por la reconciliación y exigen el cese de la violencia". A la ceremonia, celebrada en el teatro Campoamor, de Oviedo, asistió también la Reina doña Sofia y los ministros de Defensa, Julián García Vargas; Educación y Deportes, Gustavo Suárez Pertierra; y Cultura, Carmen Alborch.Los Premios Príncipe de Asturias, que por decimotercer año consecutivo ha concedido la fundación del mismo nombre, recayeron esta vez en el arquitecto Francisco Javier Sáenz de Oiza (premio Príncipe de Asturias de las Artes), la revista Vuelta, de México (Comunicación y Humanidades), el ingeniero Amable Liñán-Martínez (Investigación Científica y Técnica), el historiador mexicano Silvio Savala (Ciencias Sociales), el poeta Claudio Rodríguez (Letras), las agrupaciones militares de cascos azules de las Naciones Unidas (Cooperación Internacional), el saltador de altura cubano Javier Sotomayor (Deportes), y la Coordinadora Gesto por la Paz de Euskal Herria (Concordia). Estos premios, dotados con cinco millones de pesetas, diploma y una escultura de Joan Miró, constituyen, en expresión del Príncipe de Asturias, el homenaje de España "a la esperanza, al sacrificio, a la creación espiritual y a la concordia: a la primacía, en definitiva, de los valores de la moral y de la cultura".

Don Felipe, que cursa estudios de Relaciones Internacionales en la Universidad de Georgetown, en Washington, aprovechó la repercusión pública de la ceremonia de entrega de los premios que llevan su nombre para reclamar "una universidad creadora que también haga frente a los verdaderos problemas de la sociedad, que viva cercana a sus necesidades más inmediatas y que sea capaz de elevarse y de anticiparse a los desafíos de nuestro tiempo".

El teatro Campoamor de Oviedo rindió ayer reconocimiento muy especial a Gesto por la Paz, premio a la Concordia por su lucha cívica y pacífica contra el terrorismo, y a los 28.200 militares, civiles y policías que integran las Fuerzas de Protección de las Naciones Unidas (Unprofor). Don Felipe de Borbón tuvo un cariñoso recuerdo para el Premio Nobel de Medicina Severo Ochoa y para don Juan de Borbón. Sobre su abuelo, manifestó el Príncipe: "Siento una honda tristeza al notar su falta". De esa ausencia dijo: "No es silencio: su legado moral y su invocación permanente a la unidad y a la reconciliación quedan entre nosotros para siempre como llama viva de amor a España".