Dimite el director del Museo del Prado

El director del Museo del Prado, Felipe Garín, presentó ayer su renuncia de forma verbal ante las autoridades del Ministerio de Cultura. El motivo ha sido el "cansancio" acumulado durante el trabajo al frente de la primera pinacoteca de España, de la que tomó posesión en abril de 1991. Ningún responsable de la Administración ni del entorno del museo y del patronato, cuyos miembros consultados expresaron su sorpresa ante la decisión, quiso ayer comentar la dimisión del director. El propio Garín estuvo ilocalizable.

Felipe Garín había acudido por la mañana al Ministerio de Cultura a la toma de posesión de los nuevos directores generales de Bellas Artes y del Libró, aplazada hasta hoy al no aparecer su nombramiento en el Boletín Oficial del Estado. Regresó al museo, en el día de cierre al público, y se despidió a las dos y media de la tarde, sin comunicar a los miembros de su equipo que había presentado la renuncia de su cargo. Tampoco hizo referencia alguna al departamento de prensa.La renuncia de Garín no se vincula oficialmente al comportamiento del director con las goteras producidas durante el fin de semana del 9 y 10 de octubre en las salas XII y XIV, en donde se muestran las grandes obras de Velázquez, como Las meninas y Las hilanderas Garín, que se encontraba en Valencia, a donde regresó tras inspeccionar las salas, restó importancia a los daños ocasionados. "Un edificio grande y antiguo como éste está en permanente reparación, y ocasionalmente puede haber pequeñas fisuras. Tal vez sea conveniente aumentar el presupuesto de mantenimiento, pero ése es ya un asunto interno".

La ministra de Cultura, Carmen Alborch, visitó la pinacoteca nada más llegar de un viaje a México y adelantó que se abriría una investigación. La ministra comparece hoy en el Senado para explicar las circunstancias del suceso y sus soluciones, a petición de dos grupos parlamentarios.

Según otras fuentes, el trabajo desarrollado en el museo durante estos dos años y medio ha acumulado cansancio en Garín, considerado como "una persona honrada y trabajadora", aunque su gestión también se ha visto criticada por otros profesionales del museo. Un problema general que se acumula en la primera pinacoteca es su estructura general, más propia del siglo pasado que de un museo moderno, apuntan dichas fuentes.

Alfonso Pérez Sánchez, di rector honorario, fue una de las personas consultadas anoche que expresaron su sorpresa. "Me sorprende bastante. Acabó de llegar de viaje de Valla dolid y no tengo ninguna referencia en los mensajes que acabo de escuchar". El anterior director del museo ' dice que la se mana pasada ha celebrado reuniones del patronato con normalidad. Sobre la posible incidencia de las goteras, considera "que en otros periodos han pasado cosas más escandalosas y este caso no ha sido tan grave". Felipe Garín, vinculado desde hace años al Prado, nació en Valencia en 1943, siendo licenciado en Filosofia y Letras y en Derecho. Ha sido catedrático de Historia del Arte de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Politécnica de Valencia durante 22 años. Nombrado subdirector general de Museos del Ministerio de Cultura, con el Gobierno de UCI), ocupó ese cargo hasta 1979. Ha publicado numerosos trabajos científicos sobre las materias de su especialidad, principalmente la pintura valenciana de los siglos XV, XVI y XIX, así como sobre museología. Es vicepresidente de la Junta de Calificación y Exportación de Bienes del Patrimonio Y miembro de la Academia de Bellas Artes de San Carlos de Valencia y correspondiente de la de Bellas Artes de San Fernando.

Su experiencia en la dirección de museos ha sido amplia: de 1967 a 1990 dirigió el Museo de Bellas Artes San Pío V y entre 1972 y 1987 fue director también del Museo Nacional de Cerámica González Martí, ambos de Valencia. Miembro del Patronato del Museo del Prado desde 1985, en representación del cuerpo facultativo de conservadores, fue nombrado director de este Museo el 19 de abril de 1991, cargo que ha ocupado hasta ahora. Impulsó el proyecto de ampliación del Museo del Prado Prado con otro edificio, proyecto que provocó una fuerte polémica.