_
_
_
_

Johnny Depp: "Conecto bien con los chalados"

'Eduardo Manostijeras' dice que su horizonte va mas allá de la interpretación

El actor de Eduardo Manostijeras soñaba con ser un gran rockero, pero sus rasgos fisicos y personalidad encajaron perfectamente en el ambiente cinematográfico. Tras un par de papeles secundarios y una serie de televisión, Johnny Depp se ganó el corazón de las jovencitas norteamericanas. Recién estrenada en España El sueño de Arizona, de Emir Kusturica, donde interpreta a un hombre obsesionado con volar, y con una nueva película pendiente de estrenarse en España, Benny & Joon, Depp, ex novio de la actriz Wynona Ryder, joven mito de las adolescentes y convencido de que conecta bien con los chalados, asegura que su horizonte se extiende más allá de la interpretación.

"Me encanta actuar, pero puede ser un dilema en algunas ocasiones", explica Johnny Depp, el actor norteamericano que lleva sangre cherokee en sus venas y tatuajes en ambos brazos. "No quiero ser solamente un actor. Cuando aprenda más, me gustaría escribir y dirigir. Si permanezco en una misma área, enloqueceré", asegura tajantemente en una habitación del exquisito hotel Lanesborough de Londres.La movilidad profesional que persigue perfectamente puede llegarle de la trayectoria de sus padres, una pareja, como él mismo define, "de gitanos que se cambiaron 30 veces de casa" en los 10 primeros años de su vida. El menor de cuatro hermanos, Depp se lanzó a la aventura antes de terminar sus estudios en el instituto de Miramar (Florida). "Quería ser un gran guitarrista. Pensé que iba a hacer algo importante con la guitarra. Llegó a ser una verdadera obsesión. A los 12 años me encerré en una habitación durante 12 meses hasta que aprendí a tocar", explica con voz pausada buscando las palabras más relevantes. Entre sus primeras experiencias musicales, Depp se precia de haber sido telonero de Iggy Pop, con el que coincidiría más adelante en el rodaje de Cry baby (John Waters, 1990).

Insectos disecados

Apenas cumplidos los 20 años, Depp y su grupo, The Kids, buscaron el éxito en Los Ángeles, donde tocaron junto a Bus Boys y Billy Idol, entre otros grandes de la música. Sin embargo, la ciudad tenía otros planes para este joven al que le dan miedo los payasos y siente una gran afición por los insectos disecados. Fue Nicolas Cage quien le puso en el camino del cine y su agente quien le consiguió el primer papel en A nightmare on Elm Street (West Craven, 1984). "Tenía una personalidad fuerte y al mismo tiempo sutil. Desprendía mucho carisma", dijo Craven para justificar la elección de un actor sin experiencia ni formación adecuadas. Un año después, Johnny Depp intervino en Plaas toon, la película sobre la guerra de Vietnam de Oliver Stone.La popularidad le llegó, sin embargo, representando a un policía en la serie de televisión 21 Jump Street. En esa época, su rostro moreno y fuertemente atractivo llenó las portadas de las revistas juveniles al tiempo le que sus fans quinceañeras le esperaban a la puerta de los estudios o le enviaban mensajes eróticos por correo. "Recibí objetos realmente extraños [ropa interior o, incluso, vello del pubis]. Pero ahora puedo moverme a mis anchas", dice en Londres. Y, tapándose la cara con su larga melena, señala entre risas: "Con todo este pelo... ".

Pero, además de las jovencitas, una serie de realizadores se fijó en esta gran promesa y las ofertas comenzaron a llegar paulatinamente: John Waters le dio el papel principal en Cry baby, una película sobre pandillas juveniles, y Tim Burton le hizo representar a Eduardo Manostíjeras, -un joven inocente e inofensivo cuyos brazos terminan en tijeras en vez de en manos. "Es todavía mi película favorita. El guión me destrozó, lo leí llorando como un niño. Eduardo representa unos sentimientos universales: querer tocar sin destrozar lo que tocas", explica con voz poética.

Un tanto raro

Johnny Depp ha promocionado últimamente Benny and Joon, de Jeremiah Chechik, "una historia ingenua sobre unos personajes que son un poco extraños y no se les considera normales", según su propia descripción. Como en sus anteriores trabajos, Depp representa a un joven bueno, inocente, sentimental y un tanto raro. "Sí", afirma, "hay una conexión entre todos mis papeles". Y sigue: "Surge inconscientemente porque es mi forma de responder a las situaciones. En mi vida real mantengo una extraña conexión con las personas consideradas chaladas, soñadoras o atormentadas. Siento una afinidad con ellas. Además, todos tenemos cosas raras en la mente, inseguridades y voces internas que nos hablan".Aparte de sus rarezas que le permiten distanciarse del prototipo de actor de Hollywood, la lealtad es una cualidad que no le falta tanto a nivel privado como profesional. Por lealtad hacia el proyecto de Emir Kusturica, El sueño de Arizona, Depp dejó pasar ofertas más importantes. Los distribuidores norteamericanos archivaron este filme del realizador yugoslavo. El pasado agosto, Depp interpretó a un travestido en su nueva colaboración con Burton, Edward Wood. Y está previsto el estreno de Gilbert Grape, del realizador Lasse Halestrom. -

Su relación sentimental con Wynona Ryder ha concluido, pero su tatuaje Wynona para siempre sigue visible en su antebrazo: "No me lo quitaré", insiste, "el hecho de que ya no estemos juntos no le resta verdad al momento. Es algo que formó parte de mi vida y que seguirá conmigo".

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_