Universitaria provisional

Mi hija obtuvo en junio matrícula de honor en COU. Me puse muy contento. Incluso le hice un regalo especial: dos meses en Italia. Por hallarse ausente, me ocupo estos días de tramitar su matrícula en la universidad que rige el satisfecho señor Villapalos. Para obtener la matrícula gratuita, que tan limpiamente se ganó, he aquí el itinerario burocrático que ha tenido que hacer su padre:1. Instituto en que estudió COU para recoger el libro de escolaridad, 30 minutos.

2. Vicerrectorado de alumnos de la Universidad, 30 minutos de cola ante un mostrador. Cuando llega el turno, la funcionaria entrega unos impresos para rellenar. Ordena que vaya al banco a pagar 2.150 pesetas de tasas y que vuelva.

3. Banco del campus, cola de 15 minutos. Pago.

4. Vuelta al mostrador. Cola de 50 minutos para entregar los impresos. Resguardo para recoger el certificado definitivo. Plazo de recogida, entre 15 y 20 días.

¡Gran desolación! Sólo hay 10 días para tramitar la matrícula en la facultad. A una situación semejante creo que los griegos llamaron aporia.

5. Secretaría de la facultad, cola para recoger número y cita para formalizar la matrícula, 40 minutos.

6. Laberinto kafkiano para averiguar en los tablones el grupo y los profesores de las asignaturas troncales, obligatorias, optativas y de libre configuración (sic).

7. Día de matriculación: falta certificado. Matrícula de honor. Muestro resguardo y cuento lo que el lector ya sabe. El funcionario es poco receptivo. Consulta con un compañero. Mi corazón se acelera. Me acepta los papeles de manera provisional. Además falta una fotocopia del libro de escolaridad.

8. Banco del campus, cola de 15 minutos para pagar las tasas y obtener el sello.

9. Vuelta a la secretaría a entregar una copia.

Hoy estoy contento porque mi hija ya es universitaria provisional-