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El Parlamento ucranio reitera su negativa a conceder plenos poderes a Kravchuk

Pilar Bonet

La crisis de poder institucional en Ucrania se agravó ayer cuando el Parlamento se negó de nuevo, por segunda vez en menos de quince días, a conceder al presidente, Leonid Kravchuk, competencias para dirigir el Gobierno y asumir todas las responsabilidades de la reforma económica en el país. Los legisladores ucranios rechazaron también la petición del primer ministro, Leonid Kuchma, que quería poderes extraordinarios en materia económica.

El debate parlamentario concluyó ayer con una resolución sobre la situación social, política y económica en Ucrania. Este documento constata que la reforma se realiza con grandes dificultades y reduce el nivel de vida de la población, al tiempo que aumenta la tensión socio-política.Durante la segunda quincena de mayo, el Parlamento se negó a aceptar las modificaciones constitucionales propuestas por el Presidente, pero le dio derecho a promulgar decretos sobre cuestiones ecoómicas no reguladas por la actual legislación.

La crisis política en Kiev tiene para los legisladores ucranios prioridad respeto a la ratificación del tratado START I. "La ratificación del START I interesa a la opinión pública internacional en primer lugar, pero para nosotros lo principal hoy es la crisis constitucional, la crisis de poder", manifestó a Interfax Yuri Kostenko, presidente de la comisión parlamentaria que prepara este tratado para su ratificación.

Las tensiones entre Ucrania Rusia se han recrudecido en los últimos días a causa de las actitud de más de 200 buques auxiliares de la Flota del Mar Negro, que han izado el estandarte marítimo ruso. Leonid Kuchma propuso el martes que la base de Sebastopol sea alquilada a Rusia, dado que en el próximo futuro es poco previsible que los rusos abandonen esta localidad, sede de la Flota del Mar Negro, que se encuentra actualmente bajo el mando conjunto de los Gobiernos de Moscú y Kiev.

La situación de esta flota es el tema principal del próximo encuentro que el presidente ruso, Borís YeItsin, mantendrá próximamente con Kravchuk. Ambos habían llegado en agosto de 1992 a un acuerdo provisional sobre este polémico en tema.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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