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Lleno absoluto en el recital en Santiago de los 25 años de Voces Ceibes

El aforo del compostelano Auditorio de Galicia resultó insuficiente para el numeroso público que acudió la noche del pasado lunes al "reencuentro" de Voces Ceibes, el movimiento de canción protesta que surgió al calor de las movilizaciones de los universitarios gallegos en marzo de 1968. La convocatoria de los cantautores supervivientes, con el añadido de Raimon, hizo insuficientes el millar de localidades del auditorio, escenario elegido esa misma tarde por la incertidumbre meteorológica, hasta el punto de que el alcalde de Santiago, Xerardo Estévez, presidente del consorcio Compostela 93 que patrocinó el evento, no pudo traspasar ni las puertas ni los pasillos abarrotados de público."Muy divertido, pero quizá un poco corto", señalaba al final un joven con acné que no había siquiera nacido en 1974, cuando Voces Ceibes decidieron disolverse. Tras el escenario, Vicente Araguas mostró su satisfacción: "Yo me despedí de cantar en el 77, en Aranda de Duero, y tenía la espina de no haberlo hecho aquí". Araguas, ahora escritor y profesor, fue uno de los cinco que participaron el 26 de abril de 1968 en el recital de la facultad de Medicina que supuso la aparición del grupo y cuyo cancionero ciclostilado se repartía anteayer en una nueva edición.

Benedicto, el otro pionero y ahora dirigente de CC OO que, pese a sus desmentidos previos, cantó además de presentar, aseguró haberlo hecho porque alguien le dijo que no podría tener el corazón tan duro como para negarse, "y yo tengo el corazón muy blando". Bibiano, que formó dúo con Benedicto a raíz de la desaparición de Voces Ceibes, organizador del concierto, dijo, ante el espanto de Araguas: "Esto hay que repetirlo".

El calor del público ante las actuaciones y ante grabaciones de los eslóganes rituales de la época -"sólo faltan los grises" se oía comentar- animó incluso a uno de los impulsores del movimiento, el catedrático Alonso Montero, ahora sexagenario, que se destapó como solista con una versión épica de un tema con letra de Celso Emilio Ferreiro.

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