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Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Pasatiempos científicos

Un total de 100 fotografías, 18 de las cuales son originales y el resto copias tratadas a partir del negativo primitivo con fórmulas de época, estructuran esta exposición de tres pioneros en el Reino Unido -William Henry Fox Talbot, John Dillwyn Llewelyn y Nevil Story Maskelyne-, cuyos descubrimientos fueron decisivos para la historia del medio. Fox Talbot realizó el primer negativo fotográfico -el calotipo, tal como lo denóminó-, a partir del cual se podrían obtener infinitas copias. Sus originales, que en contadas ocasiones viajan fuera del Museo Talbot, instalado en el castillo de Lacock Abbey, se exponen ahora en unas condiciones especiales de iluminación para evitar su deterioro: bombillas y cristales que eliminan hasta el 95% de las radiaciones ultravioleta junto a una considerable disminución de la luz ambiente en sala.

Fox Talbot, padre de la fotografía moderna

Fotografias de W. H. Fox. Talbot, John Dillyn Llewelyn y Nevil Story Maskelyne. Sala de exposiciones de la Fundación NatWest, Príncipe de Vergara, 125. Madrid. Hasta el 4 de mayo.

Aficionado decimonónico

Llewelyn y Maskelyne, autores menos conocidos que Talbot y próximos a su entorno familiar, cuyas obras se muestran por vez primera en España, perfeccionaron la técnica del calotipo. Todos ellos conforman el arquetipo de ese aficionado decimonónico, culto y liberal, entregado a la fotografía con el mismo rigor que lo hiciera paralelamente con la física, la literatura, botánica, geología o el estudio de lenguas orientales...Escribe Henry M. Hughes, del British Council, que todos ellos "eran aficionados, en el mejor sentido de la palabra"; además, "contaban con el apoyo económico de sus propiedades, disponiendo de tiempo libre para dedicarse totalmente a este nuevo pasatiempo científico y artístico". Estatuto que hay que tener presente, pues este contexto social marcó el perfil de los primeros operarios de la cámara y condicionó la mayoría de sus recursos estéticos.

También, desde esta perspectiva, se justifica la trivialidad, y la disparidad, de los argumentos seleccionados por Talbot -fundamentalmente bodegones y paisajes- registrados en esos primeros negativos. Del resto se encargaron los largos tiempos de exposición necesarios para realizar una toma con la consiguiente tiranía de lo estático reflejada en sus fotos. No en vano Llewelyn, tras varios intentos fallidos de fotografiar a los animales del zoológico de Clifton en 1854, optó por la de retratarlos disecados. Por ello no es de extrañar que resultara toda una proeza la realización del retrato de La vaca de Mr. Stratton (1857), realizado con una exposición de 15 segundos por Maskelyne, en el que no se aprecia la menor señal de movimiento.

Fotografías que en la mayoría de las ocasiones no tienen otra intencionalidad que la de un mero pasatiempo científico tangencial a, la experimentación artística. "Mi cámara será mi única compañera científica -pero no sólo científica-, yo la convertiré en una compañera artística", comentaba Maskelyne, y así lo hizo en uno de los más bellos registros de esta muestra que denominó Manos, tomada en 1957. De aquí que resulten gratuitas muchas de las críticas de las que fue objeto la obra de Talbot, The Pencil of Nature -está a la venta en esta exposición un ejemplar facsímile por unas 360.000 pesetas- al tratar de analizarla con idénticos criterios que los aplicados a una fotografía de edad.

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