La Bienal de Arquitectura elige los "edificios del silencio" frente a las grandes obras del 92

La II Bienal de Arquitectura Española ha seleccionado 36 edificios construidos en 1991 y 1992, que destacan como "elementos culturales útiles para el conocimiento, lareflexión histórica y la investigación del quehacer arquitectónico". Organizada por el Ministerio de Obras Públicas, la Universidad Menéndez Pelayo y el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de Espa ña, esta edición quiere descubrir una arquitectura de pequeña dimensión, "del encuentro, del silencio", que ha quedado sepultada por las grandes realizaciones del 92, sobre todo en Barcelona y Sevilla.

El director de la II Bienal de Arquitectura Española, Pedro Casariego, y el comité de expertos, formado por los también arquitectos José Luis Íñiguez de Onzoño, José Llinás, Fernando Nanclares y Guillermo Vázquez Consuegra, han seleccionado los 36 edificios más representativos de los dos últimos años. Durante tres días analizaron los 361 proyectos de toda España, presentados por los organismos que organizan la bienal, los colegios (que agrupan a 23.000 profesionales) y los propios autores, en los que dominan los de cultura y ocio, viviendas colectivas, servicios sociales, viviendas unifamiliares, edificios institucionales y urbanización.El objetivo de la presente edición, según Pedro Casariego, es descubrir, "con intención crítica", otra arquitectura de interés que por su localización o su volumen no ha podido ser suficientemente valorada en un bienio dominado por las realizaciones de la Barcelona olímpica y la Expo de Sevilla.

La intención inicial era abordar una arquitectura de la pequeña dimensión, pero se ha llegado a un reparto de un 25% de obra grande y de obra mediana y un 50% de obra pequeña. "Piezas de pequeño formato en las que el arquitecto puede expresarse más íntimamente, donde la propiedad se implica más directamente y donde el constructor ha de esmerarse en los detalles".

Edificios seleccionados

Entre los 36 edificios seleccionados figuran una parte de las realizaciones de la Barcelona olímpica, entre otras, el palacio de deportes de Badalona y el polideportivo de Banyoles, de Bonell, Rius y Gil. Y de la Sevilla de la Expo, la estación de Santa Justa (Cruz y Ortiz), el edificio de Red Eléctrica de España (Mariano Bayón) y los pabellones de la navegación (Vázquez Consuegra) y de Castilla-La Mancha (Manuel de las Casas).En Barcelona también aparecen, entre otras, la restauración del monasterio de San Cugat (Blanco, Casadevall y García Rojo) y reforma de la avenida de la Catedral (Quintana y Periel). En Lérida, el colegio público Cervantes (de Amado Cercós y Domenech Girbau), y en Gerona, el club náutico Estartit, de Ferrater Lambarri, Rodríguez y Díaz.

Del País Vasco sólo se ha seleccionado la reforma del convento de Santa Teresa en San Sebastián, realizada por José Ignacio Linazasoro, mientras que en Galicia las obras pertenecen a La Coruña: una vivienda unifamiliar en Corrubedo, de lago Seara; el centro Cerex, de Andrés Perea, y el teatro Santa María de Ortigueira, del equipo Baltar, Salvador, Bartolomé y Almuiña. Tres construcciones de Cádiz van a exponerse en la bienal: el palacio de ferias de Jerez, de Javier Vellés; un colegio público, de Alberto Campo Baeza, y la rehabilitación del convento de la Victoria, en Sanlúcar de Barrameda, de García Márquez y Rubiño Chacón. De Toledo figura la reforma de San Pedro Mártir. De Santa Cruz de Tenerife, la estación marítima de Jet-Foil, de Martínez García, Pérez Amaral y Corona. De Ibiza, el centro insular de sanidad, de Basterra, Canalis y Llinás.

De Madrid figuran, entre otros edificios, la biblioteca Puerta de Toledo (Navarro Baldeweg), el parque Juan Carlos I (Esteras y Esteban), 23 viviendas en Villaverde (García García, Madridejos y Sancho Osinaga), y la recuperación de la fuente de los Huertos en Colmenar de Oreja (Camacho).

"El nivel de los edificios es muy alto", declara José Luis Íñiguez de Onzoño, del comité de expertos que ha seleccionado las obras. "Reflejan una línea de arquitectura controlada, .funcional y racionalista, con economía de medios y con un fuerte respeto a los lugares de emplazamiento".

Fernando Nanclares, también del comité, señala que hay otra arquitectura de interés y calidad al lado de la rotundidad de los grandes edificios. "En general, se detecta una gran profundidad y dominio de una geometría muy depurada, sobre todo en el área mediterránea. Hay un. núcleo sevillano, con formas sensatas y contenidas, con referencias a las propias tradiciones, y otro núcleo vasco, con una fidelidad a Aldo Rossi y la memoria histórica. También hay obras en Galicia de una potencia formal muy fuerte, y en Asturias, con mucho interés plástico y gusto por el color. En cambio, Madrid no acaba de tener una expresión clara".

La exposición de la II Bienal, con los planos, fotografías y maquetas de los 36 edificios, se celebrará el 1 de julio en Comillas, dentro del programa de la Universidad Menéndez Pelayo, que organizará también un curso, talleres y conferencias. A continuación se exhibirá en otras ciudades, junto con la muestra, actualizada, de la arquitectura española de los años ochenta, tema de la primera bienal, que eligió 22 edificios. El presupuesto de estas actividades es de 60 millones de pesetas. La organización de las mismas se ha retrasado al no encontrarse los suficientes patrocinios externos, de los que depende la itinerancia de las muestras.