Los catarros, según Marco
Juan Francisco Marco, director general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), de Ministerio de Cultura, atraviesa momentos de euforia porque, según él, el teatro sólo tiene, como ser vivo que es, algún que otro catarro con toses y estornudos.
Respecto a la desaparición de la revista El Público afirma que lo que ha hecho su departamento es una sustitución "Desde nuestro punto de vista tenía interés todo el aspecto documental de la revista, y eso lo continuamos ofreciendo dentro del plan de publicaciones de los fondos de documentación del Centro de Documentación Teatral, -que se presentaron ayer-". Marco está convencido de que ésa es la función de la Administración: "La información y comentarios críticos de los espectáculos que se estrenan es una responsabilidad de la prensa, no nuestra".
También habla de la desaparición del Festival Internacional de Teatro de Madrid, que en la última época estaba sostenido por las tres administraciones -central, autonómica y municipal-. "Este certamen fue una propuesta, de larga e importante trayectoria, necesaria en aquellos momentos", pero añade: "Con el transcurso del tiempo se ha normalizado la vida teatral y hay eventos similares en esta ciudad, por lo que ya no tenía tanta importancia". Marco dice que éstos fueron los motivos por los que se pensó que el festival no era tema prioritario y ese dinero se debería invertir en el teatro en Madrid.
Arreglar locales
Llegaron a un acuerdo las administraciones, al margen de sus diferentes políticas, y a todas les pareció que lo más urgente era arreglar los locales, tanto aspectos de seguridad como de comodidad. Así decidieron invertir los fondos que antaño gastaban en el festival en la infraestructura de teatros privados en Madrid. Un proyecto, de cuatro años, con un total de 600 millones. Cincuenta millones cada administración por año.Pero el Ayuntamiento de Madrid no termina de definirse; su representante, la concejal de Cultura, Esperanza Aguirre, argumenta que no se ha hecho un estudio previo. "Los temas que afectan al teatro debemos abordarlos en cooperación y diálogo las administraciones públicas y el sector teatral", dice Marco, "la solución no la tiene nadie individualmente". Afirma que ésa es la política que se ha aplicado en el INAEM. Como ejemplos concretos cita la Red Española de Teatro y Auditorios Públicos; la reforma de la orden ministerial de concesión de subvenciones, que ahora facilitará su ayuda a los agraciados una vez al año; la orden ministerial de la creación del Consejo de Teatro; y el plan de rehabilitación de teatros públicos.
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