Expertos europeos culpan al tráfico del deterioro del Acueducto

Los expertos que han participado en Segovia en una misión de asistencia técnica del Consejo de Europa que concluyó ayer han coincidido en señalar que la contaminación atmosférica ha sido la causa más importante del deterioro que ha sufrido el Acueducto en los últimos 20 años y que, si se quiere mantener este monumento romano, declarado por la Unesco como patrimonio de la humanidad, será necesario restringir aún más el tráfico y no sólo limitar la circulación bajo los arcos. Según el catedrático Giorgio Croci, el Acueducto sufre una degradación acelerada de la piedra.

Coordinada por José María Ballester, jefe de la División de Patrimonio Cultural del Consejo de Europa, la misión ha estado Integrada por Bruno Gabrielli, catedrático de Urbanismo de la Universidad dé Génova, y Giorgio Croci, profesor de la Universidad de la Sapienza, de Roma, especialista en temas estructurales de monumentos históricos. Han colaborado también José Antonio Fernández Ordóñez, miembro de la Real Academia de Bellas Artes; Bernard Winckler, especialista en ordenación de tráfico en ciudades, y el arqueólogo Daniel Paunier, catedrático de Arqueología romana en las universidades de Lausana y Ginebra.Croci señaló ayer en conferencia de prensa que "no hay riesgo de que el acueducto de Segovia se vaya a caer mañana", ya que no tiene problemas estructurales, sino de degradación acelerada de la piedra, "pero el peligro radica en que, si no hacemos nada, no se podrá salvar para futuras generaciones". Croci propuso como objetivo más importante eliminar la causa del envejecimiento del granito, que a su juicio no es otra que la polución producida principalmente por los gases del tráfico rodado.

Winckler, conocido como el mago del tráfico, insistió en que si se quiere salvar el Acueducto habrá que tomar medidas mucho más serias que las actuales, a las que calificó de "estéticas", orientadas a evitar la circulación sólo bajo los arcos, y apostó por alejar todavía más los coches a ambos lados del monumento. Esto, según el alcalde de Segovia, Ramón Escobar, del Partido Popular, no será posible hasta que esté realizada una vía de circunvalación o se ejecute un proyecto de unir algunas carreteras de acceso, ya que junto al Acueducto siguen confluyendo seis vías nacionales y regionales.

Los miembros de la misión consideraron que los trabajos que está realizando actualmente la empresa Geocisa por encargo de la Junta de Castilla y León son adecuados para conocer las patologías del monumento y encontrar una fórmula para atajar el deterioro de la piedra, aunque expresaron la necesidad de realizar la menor intervención posible y sólo la necesaría para evitar la degradación.

Tras las visitas y reuniones que han mantenido los expertos, el Consejo de Europa elaborará un documento que contemple la plantificación urbanística y paisajística del conjunto histórico de Segovia, la reordenación del tráfico y la salvaguarda del Acueducto, de su entorno inmediato. EI un plazo de tres a seis meses, el informe estará en poder del Ayuntamiento.