La Comisión Europea decide congelar los precios agrícolas de la nueva campaña

La Comisión Europea aprobó ayer los nuevos precios agrícolas para esta campana, que deberán ser ratificados en el Consejo de Ministros de Agricultura de la próxima semana. La propuesta de la Comisión se limita a congelar la mayor parte de los precios de los productos, así como a la aplicación de los recortes previstos en la reforma de la Política Agrícola Común aprobada el pasado mes de mayo.El nuevo comisario de Agricultura, René Steichen, anunció para el próximo trimestre propuestas para reformar los mercados del vino, azúcar y aceite de oliva, y para antes de fin de año los de frutas y hortalizas. René Steichen sugirió a los países que negocian desde esta semana su adhesión a la Comunidad Europea -Austria, Finlandia y Suecia- que vayan recortando ya sus ayudas a la agricultura. A su juicio, la experiencia de la CE con otras adhesiones no es positiva, ya que, dijo, "los periodos transitorios han costado mucho dinero".

El nuevo comisario indicó que el presupuesto agrícola comunitario de este año, que se eleva a 5,1 billones de pesetas, será suficiente, y comentó que en caso de que se produzcan desajustes monetarios, no habrá aumento de recursos; se recortarán algunas subvenciones en sectores con producciones excedentarias.

Para las producciones incluidas en la reforma de la Política Agrícola Común aprobada en mayo, en esta campaña se iniciarán ya los recortes de precios en los porcentajes previstos. En cereales se aprobó una reducción global de precios del 29%, aunque en esta campaña bajarán sólo una tercera parte de ese porcentaje. En el sector de leche de vaca, las medidas de reducción se adoptarán a lo largo de todo el año, una vez se hayan aplicado las cuotas en países como lalia, España y Portugal.

Menos producción de vacuno

Para el vino, aceite de oliva y azúcar está prevista una congelación de los precios, así como una revisión de las ayudas en el marco de las negociaciones para la reforma de estos mercados. En oliva, la Comisión es partidaria de eliminar las ayudas actuales al consumo que perciben las industrias y sustituirlas por un aumento de las subvenciones a la producción. Se mantienen los precios en arroz, al igual que en el algodón.

En las producciones ganaderas habrá reducciones en vacuno, según se prevé en la reforma, y se congelarán los precios del ovino y, en un 25%, del porcino.