Un tenor italiano insulta en escena a la soprano Raina Kabaivanska

"Sois unos bufones, ¿quién os ha pagado? La culpa de todo la tiene esta vieja", gritó el pasado sábado Nunzio Todisco, tenor napolitano maduro e irregular donde los haya, al público del teatro San Carlo de Nápoles, que protestaba con pitos su actuación en la ópera Adriana Lecouvreur, de Francesco Cilea. La vieja a la que aludía era su compañera de cartel, la soprano búlgara Raina Kabaivanska.La soprano búlgara, que a sus 55 años conserva unas excelentes dotes interpretativas, acusó el golpe y rompió a llorar en el escenario. La sala, si bien desconcertada, siguió aclamándola como una de las pocas divas -otra es la también veterana Mirella Freni [que ofreció un concierto el domingo en Madrid]- que en estos tiempos de crisis de voces líricas puede afrontar con éxito la difícil partitura de Francesco Cilea.

Todisco, que no era precisamente primerizo en su papel del Conde de Sajonia, había naufragado en un mar de nervios, hasta el punto de que el tercer acto de la ópera hubo de ser interrumpido porque nadie lograba convencer al tenor de que saliera a escena. La orquesta se quedó muda y se bajó el telón. Cuando Todisco hizo su aparición en el escenario por delante del telón, se desvaneció y hubo de ser sostenido por las coristas, pero al final culpó a gritos de su fracaso a la soprano que, a su juicio, había traído desde Módena, la ciudad donde ella vive, una nutrida clac para sumergir los aplausos que le dedicaba al tenor su propia familia.

El teatro de Nápoles ha suspendido el contrato de Todisco y también las representaciones de esta última ópera de la temporada napolitana hasta que encuentre otro cantante que le sustituya.