Enfrentamientos en Llodio entre trabajadores de Acenor y fuerzas antidisturbios

Trabajadores de la planta de Acenor en Llodio (Alava) protagonizaron ayer enfrentamientos contra efectivos de la brigada móvid de la Ertzaintza (policía autonómica vasca) en los alrededores de la fábrica alavesa. Desde primeras horas de la mañana, los trabajadores intentaron cortar las vías del ferrocarril a la altura de Llodio, lo que desencadenó la intervención de las fuerzas antidisturbios.

Los operarios de Llodio y Hernani y de las otras tres plantas de Acenor secundaron ayer el paro de cuatro horas por turno, en protesta por el plan de viabilidad trazado para Acenor, que prevé el cierre de estas dos plantas y el despido de más de 1.600 obreros de ahora al año 2.000.Sobre las 10 de la mañana, los trabajadores colocaron barricadas en los alrededores del polígono industrial cercano a la fábrica, prendiéndoles fuego posteriormente. Durante los enfrentamientos, los manifestantes lanzaron cohetes e, incluso, llegaron a quemar un automóvil que sería lanzado después contra los agentes de la Ertzaintza. Los incidentes de ayer no alcanzaron la virulencia de los registrados la última semana. No hubo heridos de consideración.

Por su parte, los trabajadores de Hernani (Guipúzcoa) protagonizaron durante la mañana una bocinada por las calles de San Sebastián mientras que los operarios de Basauri (Vizcaya) cortaron por espacio de diez minutos la Nacional 625 sin que se registraran otros incidentes.

Las protestas, que hasta ahora habían estado dirigidas al Gobierno central por el plan que había previsto el holding siderúrgico Sidenor (controlado por el Instituto Nacional de Industria), también fueron dirigidas al Gobierno vasco. El Ejecutivo de Vitoria dijo, recientemente, que el Gobierno central le había ofrecido quedarse con Acenor y que su intención era mantener el cierre de las dos plantas y la reducción de la plantilla en una magnitud similar a la propuesta por Sidenor. La diferencia consiste en que la reducción de plantilla se extiende a más largo plazo hasta el año 2.000. La asunción de Acenor supone suscribir el paquete de acciones del Banco Exterior, cercano al 80%.

La postura del Gobierno vasco consiste, básicamente, en segregar Acenor en dos nuevas sociedades, una de las cuales asumiría los pasivos, mientras que la otra contaría con los activos de explotación.