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Los niños de Kuwait identifican escuela con tortura, según un experto de Unicef

Pedro Gorospe

"Las escuelas de la ciudad de Kuwait fueron utilizadas como bases por el Ejército iraquí para los interrogatorios y las torturas. A los que mataban los dejaban en la calle durante 12 horas. Ahora el trauma más importante es que los niños identifican escuela con tortura", afirma James Garbarino, psicólogo enviado por Unicef, que entró en la ciudad de Kuwait con el Ejército estadounidense.

El cometido de Garbarino fue estudiar, por encargo del organismo de las Naciones Unidas, la situación de la infancia después de siete meses de ocupación. "El 70% de ellos ha visto muertos en la calle, el 20% ha perdido a familiares y un 10% resultó herido", ha añadido.Garbarino, estadounidense de 44 años, es un psicólogo especializado en el abuso y medidas sociales de prevención en los niños. Presidente del Instituto Erikson de Chicago, se ha paseado por medio mundo para estudiar el impacto de la guerra en las mentes infantiles. Camboya, Mozambique, Nicaragua, Gaza y Cisjordania, Kuwait y la violencia callejera en Chicago son algunos de los escenarios que ha visitado en calidad de experto de organismos internacionales.

Después de 10 días de estancia en Kuwait, ocupada por Sadam Husein el 2 de agosto del pasado año, Garbarino elaboró un informe para la ONU, en el que proponía la creación de centros en la ciudad de Kuwait para formar especialistas que sepan afrontar los traumas que el periodo bélico ha dejado en la infancia. "Los niños de la guerra son una generación que crece junto al odio, y ése es un sentimiento que crea identidades y, por tanto, sociedades mentalmente muy frágiles", explica.

Trauma

El "trauma de la escuela" es quizá el más cruel, y se gestó a lo largo de siete meses de continuos gritos que partían de las escuelas. Los niños escuchaban los lamentos y luego veían los cadáveres a su puerta. "En algunos lugares se están construyendo nuevos edificios porque los niños no querían volver a ellas", afirma Garbarino. En una encuesta realizada a cerca de 200 niños kuwaitíes de 12 a 15 años, el psicólogo encontró algunas coincidencias con las, respuestas de otros niños del resto del mundo. "Más del 50% no creen en el futuro y piensan que van a vivir poco tiempo, tienen serias dificultades para conciliar el sueño e identifican, al menos en un principio, cualquier tipo de uniforme militar con la muerte y el asesinato". Un porcentaje de casi el 20% de los niños kuwaitíes relató que sufrían pesadillas por la noche. En el sueño, que se repetía una y otra vez, los cadáveres les preguntaban: "¿Por qué no me ayudas?".Estos problemas se agravan por las disfunciones comunicativas que las crueles imágenes de asesinatos y bombardeos generan en la psicología infantil. Casi el total de los niños tenía como único objetivo en la vida ser un soldado para matar iraquíes", y expresaban el temor de que el Ejército de Sadam Husein pueda volver al emirato. "Es una idea defensiva", explica el enviado del Unicef, "los niños se protegen detrás de un uniforme porque descubren que incluso sus padres son vulnerables al invasor".

Garbarino regresará a Kuwait el próximo mes para poner en marcha centros terapéuticos para que los niños más afectados puedan superar el rastro de la guerra. Unicef financia el proyecto. El psicólogo fue uno de los ponentes del II Congreso Estatal de la Infancia Maltratada, celebrado recientemente en el País Vasco. Su recomendación a la ONU para poner en marcha centros de formación de profesionales en abusos y traumas infantiles coincide con una de las conclusiones del congreso.

Las ponencias, ofrecidas por psicólogos y médicos del continente europeo y americano, pusieron de manifiesto la necesidad de formar con herramientas muy específicas profesionales especializados en el campo del maltrato infantil. Los congresistas coincidieron también en la necesidad de abordar sin dilación la Ley de la infancia, e instaron al Ministerío de Sanidad a que asuma la declaración del Parlamento Europeo y adopte la Carta Europea de los Niños Hospitalizados.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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