El golpe constitucional de Gorbachov
Acuerdo entre el poder central y 10 repúblicas para la reforma radical de la URSS
El presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov, lanzó ayer en el Congreso de los Diputados del Pueblo su revolución constitucional. Como presidente de la Unión firmó con los líderes de diez de las 15 repúblicas soviéticas la creación de nuevos órganos de poder para gobernar la URSS durante un periodo transitorio hasta la elaboración de una nueva Constitución y la celebración de elecciones democráticas. Las únicas repúblicas que se mantienen al margen son las tres bálticas -Estonia, Letonia y Lituania-, Moldavia y Georgia. Ésta última condiciona la firma del Tratado a la celebración de un referéndum. Defensa, política exterior y economía comunes son aspectos claves del acuerdo.
La agencia oficial Tass afirma que la aprobación del acuerdo por el Congreso (2.250 diputados) significará "la liquidación de hecho de las actuales estructuras de poder representativas".El acuerdo fue leído en forma de declaración conjunta en la sesión extraordinaria del Congreso de los Diputados del Pueblo, el superparlamento soviético, por el presidente de la república centroasiática de Kazajstán, Nursultán Nazarbáiev, quien dijo que había sido encargado por el presidente de la nación y por los altos representantes de 10 repúblicas de leer la siguiente declaración:
"El proceso para la formación de una nueva Unión de Estados Soberanos quedó roto como resultado del golpe de Estado del 19 al 21 de agosto del presente año. Esto llevó al país al borde de la catástrofe".
"La situación que ha surgido después de] golpe puede traer consecuencias impredecibles, si queda fuera de control, tanto para el interior del país como para las relaciones con los Estados extranjeros. Declaramos que el fracaso del golpe y la victoria de las fuerzas democráticas han supuesto un fuerte revés para las fuerzas reaccionarias y para todo aquello que había venido obstaculizando el proceso de cambio democrático".
"Ha aparecido así una oportunidad histórica de acelerar la reforma y la renovación del país. En estas condiciones, los líderes del país legalmente elegidos -el presidente de la nación y los presidentes de las repúblicas y de sus Sóviets Supremos (Parlamentos)- acuerdan las siguientes medidas para un periodo transitorio hasta que sea aprobada una nueva Constitución y eligidos nuevos órganos de poder". "Estas medidas impedirán un mayor colapso de las estructuras del poder hasta tanto sea creado un nuevo sistema político de Estado en las relaciones entre las repúblicas y la formación de nuevas estructuras para la Unión inter-repúblicas".
"1. Todas las repúblicas que lo deseen pueden participar en la elaboración y firma de un Tratado sobre la Unión de Estados Soberanos en el que cada una de ellas podrá determinar la forma de su participación en la Umón".
"2. Hacer un llamamiento a todas las repúblicas, independientemente del estatus que hayan declarado, proponiéndoles la inmediata conclusión de un acuerdo económico de cooperación dentro de un espacio económico común que asegure el normal funcionamiento de la economía".
"3. Constitución de un Consejo de Representantes de los Diputados del Pueblo en base al principio de igual representación (20 diputados por cada república) para decidir sobre asuntos generales, y un Consejo de Estado (el presidente de la URSS y los presidentes de las repúblicas) para coordinar la política exterior en lo que concierne a los intereses de las repúblicas. También será creado un Comité Económico Interino Inter-republicano para coordinar las reformas económicas".
"El proyecto de Constitución deberá ser debatido y aprobado por los Parlamentos republicanos, y Finalmente aprobado también por un Congreso de representantes plenipotenciarios de la Unión de Repúblicas".
"4. Firmar un acuerdo de defensa bajo el principio de la seguridad común para preservar la unidad de las Fuerzas Armadas y el espacio estratégico militar, llevar a cabo reformas militares radicales en las Fuerzas Armadas, el KGB, Ministerio del Interior y Fiscalía General de la URSS, teniendo en cuenta los intereses de las repúblicas".
"5. Confirinar la observación estricta de todos los acuerdos internacionales de la URSS, incluida la reducción y control de armamentos, así como las obligaciones económicas con el exterior".
"6. Adoptar una declaración garantizando los derechos y libertades delos ciudadanos, cualquiera que sea su nacionalidad, lugar de residencia y afiliación política".
"7. Pedir al Congreso de los Diputados del Pueblo de la URSS que apoye las solicitudes de las repúblicas para que la ONU les reconozca como sujetos de derecho internacional y considere su acceso a la organización como miembros de pleno derecho". "En vista de que estas medidas de emergencia son dictadas por la situación existente en la URSS, pedimos al Congreso que adopte urgentes decisiones sobre estas propuestas".
La declaración está firmada por Mijaíl Gorbachov y los líderes de las repúblicas de Rusia, Ueranla, Bielorrusia, Uzbekistán, Kazajstán, Azerbalyán, Kirguizistán, Tayikistán, Armenía y Turkmenistán.
Los grupos parlamentarios de ocho de estás repúblicas en el Congreso de los Diputados rubricaron ayer también la declaración. Los de Rusia lo hicieron "por unanimidad", según el alcalde de Lenirigrado, el reformista Anatoli Sobchak.
Las repúblicas de Georgía y Moldavia no se descarta que pronto se incorporen a la corriente mayoritaria. Georgia dijo ayer que la Firma del nuevo Tratado de la Unión lo condiciona a la celebración de un referéndum sobre el tema. Moldavía, por su parte, también dijo ayer que los diputados moldavos en el Congreso están dispuestos a examinar la declaración conjunta, según el vIcepresidente del Parlamento moldavo, Ion Jardique.
El ex ministro de Exteriores, Edvard Shevardnadze, dijo ayer que la declaración de los once es "lo máximo" que se puede hacer en estos momentos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.