Los conductores de la línea 130 quieren llevar 'guardaespaldas'
El comité de empresa de la EMT ha conseguido que los problemas de seguridad de la línea 130 lleguen al Ayuntamiento. En la mañana de ayer, el nuevo concejal de Seguridad, Carlos López Collado, se reunió con Pablo Rodríguez Peña, secretario general de la Plataforma Sindical, para analizar posibles medidas para controlar la peligrosidad de esta ruta, que pasa por el poblado chabolista de La Celsa. Ayuntamiento y Plataforma coincidieron en que la mejor solución para la 130 es que en los autobuses viaje con los conductores un acompañante que actúe como guardaespaldas.
En la entrevista, a la que acudió el trabajador de la EMT que fue herido por dos yonquis, López Collado y Rodríguez Peña coincidieron en la imposibilidad de erradicar el problema a corto plazo. El concejal, que el pasado lunes hizo el recorrido de la línea 130 con parada en La Celsa incluida, afirmó que era "obligación de la empresa garantizar que el trabajo de los conductores se realize en condiciones de seguridad que ahora no existen".
López Collado y Rodríguez Peña descartaron cerrar la línea o cambiar su itinerario, dada su utilidad para los núcleos de población que une y para los trabajadores de las distintas zonas industriales por donde pasa la 130. Asimismo coincidieron en que suprimir la parada de La Celsa, como había sugerido el gerente de la EMT, Tomás Burgaleta, no resuelve nada.
Policías, no
La presencia de vigilantes jurados o policías municipales dentro del autobús también fue descartada. El representante del comité de empresa insistió en distinguir entre "delincuentes y personas enfermas", mientras el concejal añadía: "Esta medida supondría un fracaso absoluto" en un sistema democrático.Como alternativa, Rodríguez Peña planteó que junto al conductor viaje otra persona, un controlador o uno de los antiguos cobradores: "Un acompañante que, además de fuerza física, sepa de la psicología del yonqui ". "Es responsabilidad de la empresa", añadió Rodríguez Peña, "contratar de forma transitoria a 15 acompañantes para los cinco vehículos de la 130".
La medida fue calificada de "razonable" por López Collado, que adelantó que la Policía Municipal intensificará la vigilancia "para recuperar a los viajeros que la línea ha perdido". El concejal se reunirá mañana con el delegado de Gobierno, Segismundo Crespo, y con Burgaleta para tratar de los problemas de la línea 130.
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