Campaña de Cousteau para que la ONU proclame el derecho a un planeta limpio

Tras haber conseguido una gran victoria personal con la decisión adoptada recientemente en Madrid de preservar las riquezas naturales de la Antártida, el comandante Jacques Cousteau acaba de lanzar una cruzada para defender los derechos de las generaciones futuras. Su objetivo es conseguir varios millones de firmas para su petición de que el Estado francés presente en la ONU una carta de cinco puntos para la salvaguarda del planeta.

Cousteau pretende que, a propuesta de Francia y otros países, la ONU establezca con toda solemnidad el derecho de las generaciones figuras a heredar una Tierra limpia de los gravísimos riesgos de la contaminación y la sobrepoblación.El éxito (le su campaña de peticiones para convertir la Antártida en un santuario universal más de millón y medio de firmas recogidas en Francia y Estados Unidos- le ha mostrado el camino para forzar la mano de los poderes públicos.

Objetivo universal

"En nuestras sociedades democráticas", dijo ayer el octogenario e infatigable oceanógrafo, "el arma de la petición popular tiene un poder extraordinario y, sin embargo, está infrautilizada". El pasado miércoles, el presidente francés, François Mitterrand, le dió la razón de modo indirecto, al recibirle en el palacio del Elíseo poco después de haber tenido noticia de su inminente campaña.

Según Cousteau, la ONU debe proclarnar que la conservación del medio ambiente es un objetivo universal. Una de las prioridades de su propuesta es la lucha contra el crecimiento demográfico incontrolado mediante la promoción de la educación femenina y de las pensiones de vejez en el Tercer Mundo.

Para combatir la contaminación, Cousteau propone el control del consumo y del despilfarro y la promoción de energias alternativas.

La propuesta, una Declaración de los Derechos de las Generaciones Futuras, consta de cinco artículos a añadir a la carta de las Naciones Unidas y ha sido redactada por Costeau con la ayuda de tres científicos y filósofos de nacionalidad francesa y estadounidense. Sin llegar a condenar por principio la energía nuclear, el comandante piensa que debe evitarse su empleo por sistema.

La campaña iniciada ayer en Francia se extenderá en fechas próximas a otros paises occidentales. En Estados Unidos será animada por la Fundación Cousteau, una organización que cuenta con 265.000 mi embros en ese país, y en el Reino Unido por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).