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Los famosos de Hollywood fundan grupos de acción política en Estados Unidos

Las figuras de la industria del espectáculo utilizan su influencia sobre la opinión pública

RICHARD BERNSTEIN, Actores, cantantes, productores y directores de cine norteamericanos han creado una asociación que denominan Coalición Creativa, con la que intentan promover una serie de causas de orden político y social. Si hasta ahora se contaba con los famosos para su apoyo ocasional a ciertos actos benéficos, son ahora ellos los que han decidido, asumir a tiempo completo la defensa de las ideas que les preocupan. Christopher Reeve, Meryl Streep, Richard Dreyfus, Sting, Sinead O'Connor y Don Henley son algunas de las figuras que han decidido utilizar su influencia sobre el público para promover sus propias organizaciones.

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La cultura de la celebridad

Las estrellas del mundo del espectáculo, de Jane Fonda a Bob Hope, de Robert Redford a Susan Sarandon, han estado defendiendo diversas causas durante años. Ahora, con la formación de Asociación Creativa, quieren dar un nuevo empujón a sus actividades y adaptarlas a los nuevos tiempos. Hasta el momento, las estrellas de Hollywwod eran activistas a tiempo parcial, organizando como mucho uno o dos actos al año para la obtención de fondos, tal y como hizo el rockero irlandés Bob Geldof con su campaña Live Aid, contra el hambre en Etiopía. Normalmente, se contentaban con aparecer de vez en cuando para hacer una declaración o expresar su apoyo -en suma, a prestar el brillo de sus nombres- y volver después a su mundo cerrado. Pero los personajes famosos que pertenecen a la Coalición Creativa, con sede en Nueva York, están formando organizaciones por sectores (paz en Oriente Próximo, apoyo a los cultivos biológicos, impedir la destrucción de bosques...) y exigen plena dedicación. La asociación Coalición Creativa utiliza las mismas técnicas que los grupos de presión políticos. Los personajes famosos de la industria de Hollywood se infiltran en los consejos de administración de las sociedades que quieren combatir.El actor Richard Dreyfuss hace campaña sobre la paz en Oriente Próximo. La actriz Meryl Streep promociona los alimentos de cultivos biológicos con su organización Madres y Otros por un Planeta Habitable. El cantante pop Sting lucha por la selva suramericana. La estrella de rock Don Henley se esfuerza por proteger los bosques Walden, de Massachusetts, contra los urbanizadores.

"Los activistas célebres recientemente organizados", dice Betsy Kenny, vicepresidenta de asuntos públicos de Act III Communications de Hollywood, "surgieron de las elecciones de 1988"'. El candidato presidencial favorito de Hollywood era el senador demócrata por Colorado Gary Hart. Cuando la campaña de Hart se fue a pique por un escándalo sexual, algunos de sus partidarios quisieron impulsar su deshinchada campaña. "Fue así", añade Kenny, "como comenzaron a reunirse varios personajes de Hollywood tomando iniciativas y creando sus propias organizaciones

Activistas

El activismo político de los famosos de Hollywood empieza a crear una cierta polémica en Estados Unidos. Los personajes célebres pueden volverse más poderosos y más influyentes sobre la opinión pública. Estrellas como Christopher Reeve, Richard Dreyfuss, Sting, Barbra Streisand, Don Henley, Ted Danson, Ron Silver, Sinead O'Connor y otros activistas de la nueva raza del espectáculo podrán ser unos artistas brillantes, pero, ¿están cualificados para guiar a los norteamericanos en las complejas situaciones políticas o sociales? Su presencia constante en los medios de comunicación, ¿no convertirá en un espectáculo de circo lo que debería ser una reflexión sobria sobre pro blemas complicados? O'Connor declaró, al cancelar su asistencia a los Premios Grammy, que los artistas deben "inspirar y, de algún modo, guiar y curar a la raza humana".

Paul Fussel, catedrático de literatura inglesa en la Universidad de Pensilvania, se preocupa porque el celo político de las estrellas plantea un peligro concreto. "La gente va a estar engañada todo el tiempo, ilusionada por muchos circos distintos", dice. "Incluso cuando dedican su apoyo a causas que yo mismo defiendo, no me gusta, porque prefiero que una causa convenza a la gente por su propia razón intrínseca y no por este tipo de magia".

Los personajes célebres responden a estas críticas teñidas de preocupación afirmando que desean ser útiles y serios, comprender de qué están hablando y no ser lo que Reeve denominó alquile una estrella", figuras que sirven únicamente para adornar el escaparate.

"Estamos en una posición única"', declaró Christopher Reeve en una reciente entrevista. "Tenemos acceso a los políticos, que, de hecho, nos necesitan para su propia credibilidad. Los medios de comunicación también nos necesitan para vender historias. Somos simplemente ciudadanos concienciados, pero los que nos diferencia es que nosotros somos más conocidos y queremos utilizar esa ventaja de forma inteligente y responsable".

De unos años a esta parte surgen como hongos nuevas organizaciones. En 1984 se creó el Comité Político de Mujeres de Hollywood para apoyar la campaña presidencial de Walter Mondale. Tras la campana de Hart, se presentó en público la Coalición del Espectáculo, cuyo consejo de administración incluye a Dreyfuss y Polly Bergen y al director Sidney Pollack. Y, por último, llega ahora la Coalición Creativa, encabezada por el actor Ron Silver.

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