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Solchaga critica que empresas e inversores hayan paralizado sus decisiones hasta que acabe la guerra

El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, criticó ayer la paralización y "el agarrotamiento" que hay en las empresas y las instituciones públicas, que están a la espera de que la guerra del golfo Pérsico termine, y no toman ninguna decisión. Ello, en su criterio, retrasará las inversiones, habrá menos demanda y menor creación de empleo, y eso le preocupa más que los efectos económicos del propio conflicto, que en nuestro país y a corto plazo no prevé que sean graves.

Carlos Solchaga afirmó ayer en Pamplona, donde asistió al congreso del partido socialista de la Comunidad autónoma de Navarra, que toda la comunidad occidental está mirando a la televisión, deslumbrados como los pájaros cuando les pones una luz".El responsable del departamento de Economía y Hacienda mostró su preocupación porque "nadie toma una decisión. Parece como si los empresarios, y a veces las instituciones públicas, vivieran agarrotados a la espera de que la guerra termine y eso es malo porque se posponen las decisiones y consecuentemente también se retrasa la inversión y por ello habrá menos demanda y menos empleo".

Él espera que reaccionen porque eso es lo que realmente le preocupa. Más incluso que los efectos económicos de la guerra que, en nuestro país y a corto plazo, no serán graves, según sus cálculos. Por ello el ministro hizo una llamada de atención al afirmar que "es necesaria una reacción de los empresarios, de los inversores, los agentes económicos y sociales para que no salgan perjudicadas la inversión y la creación de puestos de trabajo".

El ministro, cuando asistía al congreso del PSOE navarro, fue abordado por los periodistas y respondió sobre cuestiones de índole nacional e internacional relativas sobre todo a la guerra del golfo Pérsico. Así, Carlos Solchaga subrayó que desde el punto de vista económico no habrá un "gastos significativo para las arcas públicas por las tareas de apoyo lo logístico, informa Mikel Muez.

El coste de la guerra

Negó rotundamente el máximo responsable de Economía que las Fuerzas Aéreas norteamericanas que utilizan las bases en suelo español reciban gratuitamente el carburante que necesitan.

"No es verdad que no estén pagando el carburante, como en alguna información se ha dicho", matizó el ministro de Economía, "ya que usan su propio carburante o se lo compran a las refinerías, que, como ustedes saben, se lo cobran a todo el mundo", concluyó.

El Gobierno ve con preocupación, dijo el ministro, el modo en que la opinión pública entiende el conflicto, no tanto porque la implicación de España sea muy grave, sine) por los aspectos de agarrotamiento económico que se observan en el sistema. Hay decisiones que se posponen, se invierte menos y en consecuencia se está creando menos empleo. El Gobierno tiene la esperanza de que la fasebélica del conflicto termine pronto", afirmó Solchaga, quien argumentó razones humanitarias, así como la necesidad de que las decisiones económicas y empresariales que están siendo pospuestas puedan ser tomadas en los próximos meses.

El titular de Economía valoró muy positivamente la actuación del Gobierno español ante el desarrollo del conflicto del Golfo Pérsico y se mostró convencido de que. al final, la mayor parte de los ciudadanos dé la razón al Ejecutivo y espera que lo hará todavía más aún cuando el conflicto bélico vaya concluyendo.

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