Escasa respuesta a la huelga convocada en Pinos Puente en protesta por el PER

Los vecinos de Pinos Puente (Granada) secundaron ayer desigualmente la convocatoria de huelga general lanzada por los concejales de Izquierda Unida (IU) de esta localidad. La jornada de movilización es la primera acción tomada por los ediles, encerrados en el Ayuntamiento desde el 14 de diciembre, tras analizar los presupuestos del Plan de Empleo Rural (PER) de 1991 que el Consejo de Ministros aprobó el pasado viernes, por un importe superior a los 90.000 millones de pesetas sólo para Andalucía. Los concejales de IU entienden que la oferta del Gobierno es "insuficiente".

La tibieza de la respuesta de los habitantes fue especialmente palpable en el hecho de que bastantes comercios y establecimientos permanecieron abiertos, a pesar de la difícil situación por la que atraviesa el municipio. Ésta es la primera ocasión que los vecinos no dan un apoyo masivo a los encerrados, lo que se interpreta como un reflejo del cansancio producido por una protesta que dura ya 40 días.Unas 1.000 personas cortaron a mediodía de ayer la carretera que une Granada y Córdoba a su paso por la localidad, después de haberse manifestado por las calles de Pinos Puente. El concejal de IU Manuel Capilla instó a los manifestantes a realizar el corte de forma pacífica y no responder a las provocaciones".

Los ediles encerrados demandan que el Gobierno asigne a Pinos Puente unos 600 millones de pesetas del PER para que los jornaleros puedan cubrir las 60 peonadas que la ley exige para percibir el subsidio de desempleo agrario. Además reclaman que los trabajadores puedan cobrar el subsidio con las peonadas reales que hayan trabajado, aunque no alcancen las 60.

Las demandas de los braceros y ediles incluyen inversiones que generen empleo en el municipio y la puesta en marcha de los consejos comarcales de empleo, formados por la Administración, sindicatos y empresarios, para que flexibilicen el número de jornadas.

Juan Agudo, uno de los portavoces de los encerrados, concejal de IU, pidió el apoyo de los sindicatos mayoritarios y les instó a conocer de cerca los problemas de la localidad. Según Agudo, el secretario general de UGT, Nicolás Redondo, se mostró receptivo ante esta situación en una conversación telefónica mantenida recientemente.