Brandt viajará a Bagdad con el consentimiento de la ONU y Bonn
El Gobierno de Bonn ha da do el visto bueno para que el ex canciller Willy Brandt, actual presidente de la Internacional Socialista, viaje a Bagdad para intentar la liberación de los rehenes occidentales. El que fuera premio Nobel de la paz, que se encuentra en Nueva York, podría viajar a Irak a principios de la semana próxima.El Gobierno del canciller Helmut Kohl, sin embargo, ha sugerido a Brandt que vaya a Bagdad acompañado de otros dos políticos europeos que, al igual que el ex canciller, no forman parte en la actualidad de ningún Gobierno. Se trata del ex primer ministro italiano Emilio Colombo, actual presidente de la Democracia Cristiana europea, y del antiguo comisario de la Comunidad Europea y actual presidente de los liberales del viejo continente el belga Willy de Clerq.
Brandt, que consiguió el miércoles en Nueva York el beneplácito del secretario general de las Naciones Unidas, Javier Pérez de Cuéllar, para su viaje a Bagdad, encabezaría así una misión internacional y al mismo tiempo representantiva de las tres grandes tendencias políticas de Europa Occidental, pero alejada en estos momentos de las labores de gobierno.
Según el ministro portavoz alemán Hans Klein, "el Gobierno considera que una misión formada por altas personalidades europeas, bajo su propia responsabilidad, es la mejor manera, en las actuales circunstancias, de dejar claro ante el liderazgo iraquí la exigencia de la liberación inmediata de los rehenes de todas las nacionalidades".
Entrevista con Sadam
El ex canciller alemán se encuentra en Estados Unidos desde el lunes pasado y parece dispuesto a aceptar la propuesta de Bonn, según explicó Klein. De hecho, tras su entrevista con Pérez de Cuellar, ya dijo: "Iré solo o acompañado por otros colegas europeos". Brandt pretende también entrevistarse con el presidente iraquí, Sadam Husein. Según el presidente de la Internacional Socialista, "lo más importante ahora es escuchar lo que piensa la gente de Bagdad, enterarse de si piensan o no que hay una salida viable a este tipo de aislamiento".
En principio, según explicó Klein, Kohl había propuesto a Pérez de Cuellar que los tres políticos europeos representaran a las Naciones Unidas, aunque el secretario general de la ONU no aceptó la propuesta alegando que ya había nombrado a Sadrudin Aga Jan como enviado especial para el conflicto del golfo Pérsico.
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