Un premio a la buena vecindad con Polonia

Karl Dedecius, galardonado con el Premio de la Paz que conceden anualmente los editores y libreros alemanes en el marco de la Feria de Francfort, nació en Lodz, en la Polonia de. habla alemana, el 20 de mayo de 1921. Su nombre, desconocido del gran público, ha saltado a la actualidad al suceder como titular del premio al escritor Vaclav Havel, actual presidente de Checoslovaquia.

El premio a Dedecius distingue, como ya sucediera el pasado año, a la literatura del Este. En este caso, además, premia una larga labor de introducción de la literatura polaca en Alemania. Dedecius ha traducido a numerosos autores polacos y rusos, entre ellos a Gombrowicz, Lermontov, Mayakowski, Bruno Schulz y al mismo papa Wojtyla. En plena euforia por la reunificación, libreros y editores alemanes premian la labor de un hombre que ha servido de puente con la vecina cultura polaca.

En 1951, Dedecius entró a trabajar como traductor del Instituto de Teatro Alemán de Weimar y en 1952 decidió instalarse definitivamente en la República Federal de Alemania. En este país ha compaginado su trabajo en una compañía de seguros con la realización de numerosas traducciones. Es autor además de, varios libros en los que trata de la literatura polaca y de su faceta de traductor. Entre ellos destacan Perfiles polacos (1975), De literatura y arte polaco (1981 ), De la traducción (1986), Sobre los poetas polacos (1988) y Mi relación con los libros (1990). En 1979 fundó el Instituto Polaco-alemán de Darmstadt, institución que culmina la función de Dedecius como eje entre las dos culturas.