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GUERRA EN EL GOLFO

El enemigo invisible

Gas. Éste es el peor enemigo con el que se podrían encontrar las tropas norteamericanas desplegadas en Arabia Saudí, en el supuesto de que se registre un enfrentamiento armado entre Estados Unidos e Irak. Las armas químicas, bautizadas sarcásticamente como la bomba atómica de los pobres, son un enemigo temible e invisible, capaces de paralizar el sistema nervioso de todo ser vivo hasta su muerte. Su efecto es silencioso y su acción no derrama ni una sola gota de sangre.El general Colin Powell, jefe del Estado Mayor conjunto norteamericano, ha explicado en Washington que los soldados estadounidenses desplegados en Arabia Saudí cuentan con todo tipo de material para evitar el efecto de los gases y que la intendencia militar los ha provisto de caretas, guantes, botas y uniformes de fibra -de carbón. Powell también asegura que sus tropas están familiarizadas con este tipo de armas y que todos los soldados cuentan con equipos de descontaminación y antídotos inyectables (atropina).

Calor y careta

Expertos militares opinan que las caretas y los uniformes especíales son defensas adecuadas para prevenir ataques con armas químicas, pero aseguran que esos equipos Impiden la facilidad de movimientos en combate y quejunto con el calor del golfo Pérsico, son dos problemas para el uso de este tipo de defensas.

Irak cuenta con un gran arsenal de gas mostaza y utilizó este tipo de armas durante su conflicto con Irán, así como para reprimir las sublevaciones de las minorías kurdas en el interior de su propio país. Los iraquies también poseen gas paralizante. Los dos gases actúan de una forma similar: penetran en el cuerpo a través de las vías respiratorias y la piel y paralizan los pulmones y los nervios.

El presidente Bush ha anunciado que su respuesta a este tipo de armas, caso de que Irak las utilice contra sus tropas, será "muy, muy dura". Estados Unidos y la Unión Soviética acordaron el pasado mes de junio la reducción de sus arsenales químicos hasta un máximo de 5.000 toneladas, lo que supone un recorte de su capacidad actual en un 80%. La ONU también ha condenado el uso de esta arma letal, pero los iraquíes, a través de su embajador en Grecia, han amenazado con utilizar este tipo de arma si sufre algún ataque procedente de Israel o de EE UU.

El propio Sadam Husein ha amenazado con que si alguien pretende sacar a sus tropas de Kuwait convertirá aquel país en un "cementerio". Husein ha declarado también que si sufre un ataque israelí quemará la mitad de Israel. En ambos casos nadíe duda sobre qué tipo de armas utilizaría para repeler esas agresiones.

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