_
_
_
_

La Feria del Libro Feminista se inaugura en Barcelona con una notable presencia internacional

La IV Feria Internacional del Libro Feminista se inauguró ayer en las Drassanes de Barcelona. En la feria se han instalado más de 200 casetas de libros escritos o pensados para mujeres, con destacable presencia de editoriales de todo el mundo. Las paradas de instituciones oficiales se mezclan con editoriales y organizaciones feministas, o con editoriales que, simplemente, presentan libros de mujeres. Se espera que unas 150 escritoras asistan a la feria. El polémico catálogo de autoras catalanas, que provocó la retirada de Ana María Matute, no se ha presentado de momento.

Comentaba hace unos días Mireia Bofill, una de las organizadoras, que sería más propio hablar de Feria Feminista del Libro que de Feria del Libro Feminista. A lo visto de lo expuesto tiene toda la razón. El centro de la feria son los libros escritos por o para mujeres, pero no necesariamente feministas.Al lado de las editoriales convencionales, que presentan sólo obras de mujeres, conviven otras casetas de más precisa adscripción, como la de la extinta Ediciones la Sal, la prestigiosa Virago Press británica, The Feminist Press de Nueva York o la francesa Lesbia Magazine. Llaman la atención algunas paradas exóticas, como las de Ghana, Zimbabue o Suráfrica y las numerosas nacionalidades presentes: noruega , italiana, sueca, estadounidense, canadiense, británica, india y un largo etcétera.

Un público compuesto mayoritariamente por mujeres deambulaba ayer por la feria, que permanecerá abierta hasta el sábado, en una primera toma de contacto. Uno de los escasos hombres presentes era Jorge Herralde, de Anagrama, que expresaba su preocupación por los pocos datos que tenía sobre la llegada de una de sus autoras, la norteamericana Grace Palley. A otras escritoras anunciadas, como la marroquí Fatima Mernissi o la egipcia Abud Nawal El-Sadawi, se las espera entre hoy y mañana.

La feria ha tenido un amplio eco internacional. Una veintena de periodistas extranjeros se han acreditado para cubrir los debates que se celebrarán paralelamente a la feria. A la anterior edición, celebrada hace dos años en Montreal (Canadá), asistieron 15.000 personas.

La arquitectura gótica de las Drassanes otorgó un aire solemne al acto de inauguración de la IV Feria del Libro Feminista. En uno de los fosos de los antiguos astilleros -ante una estatuta de Juan de Austria que las organizadoras intentaron retirar inútilmente- se instaló, con prisas, una mesa presidencial. Habló en primer lugar la escritora María Aurèlia Capmany y la siguieron, en equilibrado orden institucional, representantes de la organización, del Gobierno, Ayuntamiento y Generalitat. Ningún representante de la Diputación de Barcelona -responsable de la presencia de Juan de Austria en el foro feminista- estaba presente en la mesa.

Durante los próximos días se celebrarán debates -con escritoras catalanas, españolas y extranjeras- sobre distintos aspectos de la relación de las mujeres con el libro. El viernes, una fiesta sólo para mujeres, en el parque del Laberint d'Horta, pondrá punto final a la feria. Paralelamente, se celebra un ciclo de cine de mujeres en la Filmoteca y varias exposiciones.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_