La decisión sobre la unión política no madurará hasta jumo, según Delors

La unión política será el tema central del debate en el Consejo Europeo de la CE que se celebrará el próximo sábado en Dublín, según afirmó ayer en Bruselas el presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors. Entre esta cumbre extraordinaria y la que se celebrará el 25 y el 26 de junio, afirmó, "habrá tiempo y una atmósfera menos tensa para convocar la segunda conferencia intergubernamental", que debe llevar a cabo ese nuevo reto en paralelo con la unión económica y monetaria. Delors anticipó que planteará a los Doce una ayuda especial "como señal de fraternidad a los alemanes del Este".

Los socios comunitarios, que ponen en común parte de su soberanía, "deben renovar su matrimonio" y demostrar que 1a CE se construye sobre el cemento y no sobre la arena". Estas bodas de plata de la CE han llevado a los Doce a prometerse la unión política, con la única resistencia del Reino Unido, si bien su primera ministra, Margaret Thatcher, "aceptará la discusión sin rechazar el concepto y planteará contrapropuestas".Más que de unión política, Delors prefirió hablar de "reforzamiento de la dimensión política de Europa" como debate base del que la cumbre se ha dotado sin que hace un mes estuviera previsto. Las premuras de tiempo inclinarán probablemente a los Doce a encargar a los ministros de Exteriores el perfil del gran reto de la construcción europea y dejar para junio la decisión sobre la convocatoria de una segunda conferencia intergubernamental, que, junto a la de la unión monetaria, dote a la CE de la capacidad de asumir su papel de gran potencia, no sólo en el terreno comercial.

Sobre la mesa está el proyecto franco-alemán de traspasar a la CE competencias en materia de política exterior y de seguridad en el horizonte de 1993. También la propuesta belga de reforma de las instituciones y creación de un Gobierno comunitario, que ofrece las ventajas de construir esta arquitectura sin tener que reformar los tratados comunitarios. Ninguna de las dos alternativas entra en los detalles, y mucho menos en la filosofía de si la Europa comunitaria deberá ser una federación o una estructura de poder confederal, discusión aún prematura si se quiere llegar a un acuerdo.

Esta urgencia de la unión política, según Delors, viene dictada "por la preocupación de que la unificación alemana se produzca dentro de la integración europea". También por el desfase entre la cooperación política y la integración económica de los Doce y por "el déficit democrático" con que funciona la Comunidad, como ha denunciado el Parlamento Europeo.Temas asumidos

Delors insistió en que los temas por los que esta reunión extraordinaria de los jefes de Estado y de Gobierno de la CE fue convocada, es decir, las consecuencias de la unificación alemana y la apertura al Este, están prácticamente asumidos, después de la buena acogida de los dos informes de la Comisión Europea por parte de los ministros de Asuntos Exteriores el pasado día 21.La RDA iniciará un período de adaptación a la CE el próximo 2 de julio, coincidiendo con la puesta en marcha de la unión monetaria alemana. La integración automática de esta parte del territorio alemán se producirá con la unión formal de las dos Alemanias, probablemente en la segunda mitad del próximo año. A partir de ahí se iniciará un período de excepciones transitorias, similar al que gozan España y Portugal, hasta la plena aplicación del derecho comunitario.

Aceptado el modelo, a la cumbre sólo le queda aceptar sin reservas la unificación alemana. Deberá también confirmar que las autoridades alemanas aceptan "concertar con la CE el tratado de unificación y las etapas de la incorporación comunitaria de la RDA".