Todos los grupos de oposición a Pujol piden la retirada del plan catalán para residuos industriales

Los partidos políticos en la oposición en el Parlament de Cataluña alcanzaron el pasado sábado por la noche un principio de acuerdo para presentar conjuntamente el próximo día 21 una proposición no de ley que solicite la. retirada del Plan Director para la Gestión de los Residuos Industriales de Catalunya (PDGRIC), aprobado por el Gobierno catalán y que ha tenido un gran rechazo popular.

Representantes de todos los partidos en la oposición acordaron tomar esta iniciativa en una asamblea multitudinaria convocada en la localidad tarraconense de Montblanc (Conca de Barcerà) por la plataforma de ex alcaldes y ex concejales que han dimitido por el proyecto de la Administración autónoma de ubicar, en un municipio de la citada comarca, Forés, un vertedero de residuos industriales. Los ex alcaldes han convocado a los habitantes del la Conca a manifestarse e próximo día 21 en Barcelona frente al edificio del Parlament.La asamblea, que estaba presidida por los alcaldes y concejales dimitidos de esta comarca, la mayor parte de ellos de Convergència i Unió (CiU), se convirtió en algunos momentos en un acto de crítica profunda a la gestión realizada por el Gobierno de la Generalitat en los últimos años en la provincia de Tarragona. El diputado socialista Joan Maria Abelló afirmó que durante los últimos ocho años la Administración autónoma ha invertido en la Conca un promedio de unos 200 millones de pesetas por año, "mientras que el presupuesto previsto para el vertedero de Forés prácticamente supera la cifra de todo este período, unos 1.500 millones de pesetas".

El diputado del Partit dels Comunistes de Catalunya (PCC), Celestino Sánchez, aseguró que la Generalitat ha redactado el PDGRIC con el objetivo de "hacer negocio con la basura", y advirtió del riesgo de que "residuos industriales de otras zonas de España y Europa vengan a Cataluña".

300 vertederos ilegales

Esta tesis fue compartida también por el parlamentario de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) Josep Lluís Carod, quien duda que el Gobierno de la Generalitat pueda garantizar un correcto cumplimiento del Plan de Residuos, "si hasta ahora ha permitido que existan más de 300 vertederos ¡legales",.El diputado de Iniciativa per Catalunya, Víctor Gimeno, afirmó que el Gobierno catalán eligió a la comarca Conca de Barberà para desarrollar parte del PDGRIC porque suponía que era una una zona "de baja conflictividad social", pero añadió que esto era sólo "una suposición", tal como se ha demostrado. Gimeno criticó la provocación del secretario general de Presidencia, Lluís Prenafeta, quien afirmó la semana pasada que "la Generalitat no tocará ni una coma del Plan de Residuos".

Por su parte, el parlamentario de Esquerra Republicana Joan Manel Sabanza criticó que en la redacción del plan hayan primado los argumentos económicos. "Los vertederos previstos serán de grandes dimensiones con el objetivo de reducir costes", explicó.

El diputado por Tarragona del PP Josep Curto lamentó las dimisiones de los alcaldes, pero añadió que comprendía la decisión porque "la Generalitat se ha inmiscuido en unas competencias que no son suyas". Los diputados autonómicos explicaron que sus respectivos partidos preferirían un plan que prevenga una reducción de la generación de residuos y que éstos sean tratados en el lugar en que se producen.

Desgaste

Los parlamentarios destacaron que el caso del PDGRIC no es el único en el que la Generalitat ha perjudicado seriamente a las comarcas deprimidas en beneficio de Barcelona. Los diputados aludieron, refiriéndose a la circunscripción de Tarragona, a las centrales nucleares, las industrias petroquímicas del Camp de Tarragona y al polémico trasvase de aguas del Ebro a Barcelona.Los partidos en la oposición aprovecharon ayer al máximo para realizar una campaña de desgaste de CiU, en una comarca considerada hasta ahora como un clásico feudo de la coalición nacionalista.