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INVASIÓN EN PANAMÁ

Fuertes combates entre leales y tropas de EE UU

Durante todo el día y la noche de ayer prosiguieron los combates con artillería pesada y ligera en la ciudad de Panamá y algunas zonas del interior del país. Con especial saña se peleó en Patacón, al noroeste de la capital, en donde oficiales dirigen a milicianos nerieguistas. Asimismo, los alrededores del hotel Marriot y el barrio de San Miguelito continuaron siendo escenario de fuertes tiroteos. La zona donde se encuentra la Embajada de España acaba de ser declarada zona de combate, según hemos oído por la radio. Un coche que no se ha detenido cuando le han dado el alto ha volado por los aires. En estos momentos (19.30. hora peninsular), las tanquetas situadas frente a la Embajada, en el Ministerio de Exteriores, están arrojando una lluvia de proyectiles de 50 milímetros contra el edificio de la Lotería, que quieren tomar, aunque no vemos a ningún guerrillero dentro.

La situación en todo el país es caótica. El vacío de poder se acentúa, pese a que ayer tomó posesión el nuevo presidente Endara, quien constituyó un Gobierno "de reconstrución y reconciliación nacional", cuyas dos vicepresidencias ocupan respectivamente, Ricardo Arias Calderón y Guillermo Ford, líderes de la hasta hace poco oposición civilista.El vehículo en que viajaba Arias fue alcanzado al mediodía por varias ráfagas de armas automáticas, cuando pasaba cerca de la sede del Parlamento, donde funciona el nuevo Gobierno. Los analistas consideran este atentado fallido como el inicio de la guerra ete guerrillas que tendrá que soportar Estados Unidos en ese país centroamericano, donde algunos de los leales al general Noriega ya se han lanzado al rrionte, informa Rafael Candanedo,Fuentes del Comando Sur señalan que se han producido por parte yanqui 21 muertos, 202 heridos y dos desaparecidos, todos militares. Asimísino, las bajas militares pameñas que los norteamencanos tienen en su poder son: 120 muertos, 70 heridos detenidos y 1.447 apresados. Según cálculos oñciosos, han muerto más de 500 panameños y los heridos se cuentan por millares.

Durante toda la jornada se sucedieron los rumores sobre la eventual captura del general Noriega que, posteriormente, fueron desmentidos por el Pentágono. Todos los cañonazos norteamericanos no sirven para averiguar dónde se encuentra este hombre, cuya seguridad tienen encomendada ex agentes del servicio secreto israelí.

Los actos de pillaje alcanzan cotas indescriptibles y se ven reforzados por el comportamiento arbitrario de las tropas de ocupación, que en las últimas horas están deteniendo indiscriminadamente a los adultos de sexo masculino de edad superior a los 16 años, bajo pretexto de que pueden pertenecer a los Batallones de la Dignidad, leales al general Noriega y dispersos en una especie de locura que oscila entre la guerrilla y el vandalismo.

Lo que aquí llaman "árcas revertidas", es decir, zonas qué antes de 1979 pertenecían a las bases y estaban bajo control norteamericano, son las partes de la ciudad que sufren especialmente registros y detenciones. Ana María López, en comunicación telefónica, contó a esta enviada que su rrarido, empleado en aeronaútica, acababa de ser sacado a punta de metralleta de su casa, por soldados carapintadas que le condujeron hasta un grupo de unos 40 vecinos que habían sufrido la, misma suerte. Manos en la cabeza, esperan que los camíones se los lleven rumbo desconocido. Horas después, unos 20 marines con dos tanquetas y provistos de un plano allanaron la residencia de Carlos Weetgreen, un empresario amigo de Noriega. En la casa, a escasos metros de la sede de la agencia Efe, hicieron estallar varías cargas explosivas y luego la dejaron abierta para facilitar un saqueo, que se produjo de inmediato.

Se sabe que entre los cautivos de las últimas horas y de esa zona se encuentra el director de la Orquesta Sinfónica de panamá, Jorge Ledesma, un horribre pacífico a quien la gente respeta. Corre el rumor de que los soldados norteamericanos han comentado entre ellos que van a utilizar a civiles panameños como pantalla para avanzar en busca de posiciones norieguistas.

Guillermo Endara, que durante la trágica noche del martes al miércoles se autoproclamó presidente -en virtud de las elecciones del 7 de mayo último, pero con un baño de sangre de compatriotas como telón de fondo-, se encuentra ahora en una, situación por lo menos delicada. Algunos oficilales parecen dispuestos a rendirse y reintegrarse a la vía Sin embargo, parece difícil que la jauría de saqueadores armados que circula impunemente Por Panamá acuda a sus pies para entregar el fusil a cambio de una recompensa de 150 dolares y comprometerse a ser buenos por una paga fija.

Una locura colectiva se ha apoderado de todos. Parece que a nadie le importa lo que va a ocurrir en este país. Grupos de milicianos con metralletas rompen a culatazos los cristales de los comercios o saltan a balazos, los cierres metálicos. Entran, revientan las cajas fuertes, se llevan el efectivo y, a continuación, permiten que la turba, que ha estado esperando que hicieran el primer trabajo, se arroje dentro para llevarse hasta la última mota de polvo. En muchos casos, como colofón, prenden fuego a las tiendas.Sólo los populares y poderosos comercios de la cadena El Machetazo quiere el fracaso, no compre en el Machetazo", reza la publicidad diseminada, por toda la ciudad- se han salvado, por el momento, por disponer de un pequeño ejército piropio. Anoche, la Embajada de Francia fue saqueada en parte por los incontrolados Habían cometido el error de apagar Ias luces. El problema es que, si se mantienen prendidas a los norteamericanos les puede entrar ganas de disparar.

'Síndrome Noriega'

Las tropas invasoras parecen, como su presidente Bush, ser víctimas del sindrome Noriega, y no les importa nada lo que les ocurre a los civiles cuya democracia han venido a salvar. Primero disparan y, después no preguntan, La radio oficial del nuevo régimen, portavoz del Comando Sur y del Gobierno de EE UU, pomposamente llamada, Red Patriótica de Divulgación de la Verdad, aconseja permanentemente a los panameños que no se opongan a los "aliados que han venido a ayudarnos", y al mismo tiempo advierteri "que los norteamencanos están en posesión de sofisticados medios electrónicos incluso satélites, paraconocer lo que ustedes hacen hasta dentro de sus casas". Los vituperios contra Noriega y sus seguidores son de "sabandija inmunda" para arriba. Entre las denuncias, que han encontrado 50 kilos de cocaína en un despacho cercano al del general.

Este tono no colabora precisamente para que se imponga la cordura, por no decir la ética, en una población empobrecida, embrutecida por los combates y sobre todo, educada en la cultura consumista estilo Miami. Esta. periodista pudo ver, entre otras aberraciones, a un muchacho que se había rajado el muslo con los cristales de un escaparete, y que, con un torniquete de urgencia hecho con un pañuelo, esperaba tumbado en la acera una, ambulancía. Su pierna herida descansaba sobre la estufa que acababa de robar, y cuando los sanitarios llegaron para, llevárselo, casi lloró porque no podía arrastrarla consigo. La temperatura ambiental es de 35 grados.

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