José Antonio: "Mi 'Don Juan' no es machista"

El Ballet Nacional de España estrenará el próximo jueves 21 su más ambicioso espectáculo hasta la fecha, Don Juan, adaptado -sobre Don Juan Tenorio, de Zorrilla- y dirigido por Miguel Narros, con coreografía de José Antonio, música de José Nieto y decorados de Andrea d'Odorico. Un montaje que ha costado 100 millones y del que José Antonio espera "que lance una moda Don Juan para los noventa como Carmen lo hizo en los ochenta". El coreógrafo y bailarín, director de la compañía oficial desde 1986, precisa que su aproximación al personaje "no es machista".

José Antonio -38 años, madrileño, bailarín profesional desde los 13- no responde al tipo tradicional de bailaor histriónico y arrollador. Menudo y retraído, con aspecto y timidez de adolescente bien educado, no se emociona cuando habla de sus triunfos, sino cuando surgen en la conversación su familia y su casa de las afueras de Madrid, "que me permiten reencontrarme con la naturaleza y conmigo mismo". Reivindica un Don Juan romántico "que se enamora, que tiene necesidad de enamorarse de cada mujer que seduce", y cuya faceta pendenciera, bravucona y machista "es sólo una forma de mantener el tipo frente a los demás, una manera de responder a lo que la gente espera de él".Hace más de un año que lleva trabajando con Narros y con el músico José Nieto en esta producción, que no sólo es la más importante que ha acometido como coreógrafo, sino también el montaje más ambicioso del Ballet Nacional en sus 11 años de vida. Aparte de las reposiciones, como El sombrero de tres picos, sólo se había intentado hacer un ballet que durara toda la noche con el Don Quijote, de Luisillo, en la época de Antonio, que tuvo corta vida.

Ahora, con la conciencia de tener, un buen tema para danza -explotado a lo largo de más de dos siglos por muchos coreógrafos, pero sin que ninguna versión haya logrado permanecer- se ha hecho un esfuerzo poco frecuente por reunir un elenco de estrellas y asegurar el éxito.

Trinidad Sevillano

"Llamé a Trinidad Sevillano porque desde su marcha a Londres ha tenido muy pocas oportunidades de bailar aquí y pensé que podría ser una Doña Inés maravillosa", dice José Antonio. La presencia de Sevillano -que ha dejado su puesto en el London Festival (hoy English National) Ballet, después del notable éxito personal que obtuvo el pasado verano al presentarse con la compañía en Nueva York- es, efectivamente, uno de los atractivos de este Don Juan. José Antonio no ha querido, sin embargo, que la presencia estelar de Sevillano eclipse a la primera bailarina titular del Ballet, Aida Gómez, que será quien estrene el papel (Sevillano ocupará su puesto días después). La coreografía de Doña Inés es la misma para las dos, la única basada en la técnica clásica", explica José Antonio, "pero, por supuesto, Trinidad la baila en puntas y hace una Doña Inés tan espiritual que es la personificación de la virginidad, con un cierto morbo de inocencia que sólo ella podía darle".José Antonio, que se siente orgulloso de la compañía (que obtuvo en 1988 el primer premio de la crítica neoyorquina al mejor espectáculo presentado en el Lincoln Center), ha recuperado también a Antonio Alonso, el inolvidable Jasón de la Medea original, que interpretará a Don Luis (alternando con Juan Mata), y a José de Udaeta -el gran maestro de danza española que trabaja casi permanentemente en el extranjero-, que encarnará al Comendador. Merche Esmeralda será la Muerte, un personaje que se ha introducido para dar unidad y una dimensión trágica a la obra y que "es la verdadera gran enamorada de Don Juan, la que le guía, le seduce y goza cuando él seduce". Y el propio José Antonio, Don Juan.

Esta acumulación de funciones -director, coreógrafo y bailarín estrella- no parece abrumar a José Antonio, quien explica que lleva con resignación las tareas directivas, le apasiona coreografiar (aunque, sobre todo, dice, para los demás) y estima que aún está en buenas condiciones para seguir bailando. Pero todavía no ha decidido si aceptará la oferta de renovación de su contrato que le ha hecho ya el Ministerio de Cultura.

Tiempos de cambio

"Yo estoy ligado a esta compañía desde que se fundó", recuerda José Antonio, que tiene la reputación de ser el más técnico de los bailarines de baile español y de haber imprimido un cierto sello defrialdad a la compañía. "Lo que pasa es que los tiempos han cambiado, la identidad de los españoles -y, por tanto, de lo que es el baile español- ha cambiado también. El español de hoy es una mezcla de muchas cosas; en el baile hay que procurar preservar la autenticidad de nuestras tradiciones, pero la formación de los bailarines tiene que ser completa. No podemos ceñirnos a un estilo o a una escuela; por ejemplo, sólo al flamenco, con exclusión de lo demás".En el montaje del Don Juan ha trabajado con Miguel Narros sobre todo la organización teatral del relato y la caracterización de los personajes, que, en su opinión, es lo más difícil en un ballet dramático.

La envergadura de los decorados y el montaje impidieron que la obra se estrenara, como estaba en un principio previsto, en el teatro Lope de Vega de Sevilla y que obtuviera el patrocinio de la Expo 92. "El escenario era pequeño y no podíamos empezar con rebajas", dice José Antonio.

Cuando se menciona el tema de la huelga, ya desconvocada, el responsable de la compañía palidece y hace esfuerzos por mantenerse sereno. "Yo con eso no tengo nada que ver; los motivos son económicos y se discuten con el Ministerio de Cultura".