La Casa Blanca dice que la 'contra' acepta negociar con el Gobierno de Managua

La Casa Blanca anunció ayer qué la contra nicaragüense ha aceptado la propuesta de Daniel Ortega de mantener conversaciones directas, en la sede de las Naciones Unidas, para negociar la paz. Un portavoz de la contra señaló en Tegucigalpa que las conversaciones se celebrarán el próximo día 13 y no la semana próxima, como había indicado Ortega. Mientras tanto, tropas de¡ Ejército sandinista, apoyadas por helicópteros de fabricación soviética, participan en una operación contra reductos de la Resistencia Nicaragüense (RN) en la región central del país.

En las últimas horas se han registrado diversos combates en lo que podría ser un intento de conseguir por las armas lo que los sandinistas no han conseguido por la negociación: acabar con la contra.

El ministerio de Defensa nicaragüense negó que se hubiera iniciado una "ofensiva militar", aunque confirmó la existencia de "preparativos". El diario oficial sandinista, Barricada, informaba ayer de la ofensiva, al tiempo que unidades de reservistas han sido movilizadas en distintas ciudades del país para hacer frente a un eventual recrudecimiento generalizado de la guerra.

El presidente nicaragüense continúa, sin embargo, convocando al diálogo para poner fin al conflicto sobre la mesa de negociaciones. En un intento de dar mayor consistencia a la reunión, Daniel Ortega invitó al arzobispo de Managua, cardenal Miguel Obando y Bravo, quien inmediatamente aceptó participar como observador.

La contra, por su parte, aceptó la propuesta de mantener conversaciones directas en la sede las Naciones Unidas, según anunció ayer la Casa Blanca. El portavoz presidencial estadounidense, Marlin Fitzwater -quien dijo que la oferta de Ortega tiene "signo positivo"- anunció que los dirigentes de la contra han aceptado participar en es este tipo de reuniones, "que nosotros habíamos pedido desde hacía mucho tiempo".

Daniel Ortega ha advertido que las conversaciones en la sede de las Naciones Unidas deben tener como único fin el de detener la guerra de forma definitiva, no la concertación de otro alto el fuego.

El Gobierno de Honduras, que también debe participar en el encuentro, ha informado que todos los Estados centroamericanos deberían enviar representación a Nueva York con objeto de mantener vivo el espíritu de Tela, donde se pactó la desarticulación de la contra para el próximo 5 de diciembre. Honduras todavía no ha confirmado su asistencia, aunque sí lo ha hecho la RN.

Al término de su conversación con Obando, el presidente Ortega garantizó el jueves que la medida de suspender el alto del fuego unilateral no tiene por objeto, como denuncia la oposición, interferir el proceso electoral, sino, por el contrario, "preservar las elecciones".

Ortega declaró que sólo una invasión militar por parte de EE UU podría obligar a suspender las elecciones, aunque opinó que no cree que existan perspectivas en ese sentido. Por el contrario, el líder sandinista consideró que la reacción de Washington a la decisión de Managua había sido "cuidadosa y constructiva".