_
_
_
_

Elegancia

Ángel S. Harguindey

Es fundamentalmente un hombre sabio. Ahora ya sólo falta intentar comprender qué es la sabiduría. Si nos atenemos a sus escritos autobiográficos, a sus gustos personales, a su constante interés por todo lo que se mueve en el ámbito cultural y a lo que se puede deducir al escucharle, se llega a la conclusión de que la sabiduría es básicamente capacidad de observación, sencillez y una elegante automarginación.La capacidad de observación de Julio Caro llega a lo insospechado: le fascina Nápoles, la arquitectura popular, Cioran o los tratados de fisiognómica. Conoce a Bukowski, ama a Wagner y respeta al ser humano. Quizá eso explique su desprecio por la soberbia y la intolerancia.

Más información
Julio Caro, Baroja, premio Menéndez Pelayo por sus investigaciones

Su sencillez es visible. Desde su indumentaria -los días importantes suele llevar pajarita-, hasta sus gustos gastronómicos -cocina tradicional, preferentemente vasca. Puede atender consultas de saharauis o de adaptadores de El Quijote para la televisión con el denominador común de la desinteresada amistad. En el ámbito de lo financiero su talante también es ejemplarmente sencillo: le han estafado siempre que han querido.

Y esa capacidad asombrosa para no ganar dinero le confiere una elegancia innata. Se marginó del mundo de la docencia -aún hoy le piden una fe de vida para cobrar una pequeña pensión que se niega a cumplimentar-, de los cargos públicos y de todo lo que huele a triunfo hortera. Ni siquiera tiene un BMW.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_