El Gobierno no quiere frenar la economía, sino sólo encauzarla, según Solchaga

, Las últimas medidas de política económica tomadas por el Gobierno no pretenden frenar el crecimiento económico sino encauzarlo "para que fluya en el tiempo", declaró ayer el ministro de Economía, Carlos Solchaga, tras la convalidación por el Congreso del real decreto ley que aumenta los pagos a cuenta del impuesto de sociedades.

Esta medida de política fiscal detraerá de la economía un volumen de fondos que puede situarse entre los 120.000 y los 200.000 millones de pesetas. Economía estima una cuantía de 135.000 millones, que corresponden al aumento de la recaudación de los pagos a cuenta que deberán realizarse en Julio, octubre y diciembre, y que en total equivalen a un 55% de los beneficios obtenidos durante el año pasado.

El aumento de recaudación por este concepto no equivale a un aumento de la presión fiscal por lo que, en opinión de Solchaga, no afectará a los planes de inversión de las empresas. En caso de problemas de tesorería, los pospondrá en el tiempo. Ése es, dijo el ministro, el objetivo del Gobierno.

Esta medida, además, llegó acompañada de la reducción del gasto público en 115.000 millones de pesetas, que sumados a los 135.000 millones de aumento de ingresos por este impuesto, equivalen a un 0,6% del producto interio bruto.

Por eliminación

Solchaga Justificó ante el Pleno la elección del impuesto de sociedades por las dificultades que atraviesan otras figuras tributarias. En el caso del impuesto sobre la renta el aumento de las retenciones a cuenta quedaba descartada por el cambio de regulación ahora pendiente (y sobre el que el ministro declinó hacer cualquier tipo de declaración a su salida del Congreso). Un aumento de tipos impositivos tanto en el IVA como en los impuestos especiales quedaba también descartado por el proceso de armonización fiscal que estudia la Comunidad Europea.

Sólo quedaba el impuesto sobre sociedades y el real decreto -ratificado ayer con un sólo voto en contra y 58 abstenciones- adelanta una mayor parte de la cuota que habría que pagar en 1990 sobre los beneficios de este año. El adelanto previsto en el decreto es de un 10% en julio, un 15% en octubre y un 30% en diciembre, mientras que el año pasado sólo había que pagar un adelanto a cuenta de un 30% en octubre.