Gorbachov defiende el pluriempleo de los nuevos diputados soviéticos

Mijail Gorbachov, recién elegido presidente del Soviet Supremo de la URSS (jefe del Estado), dirigió astutamente al Congreso de los Diputados en la dirección por él deseada en los preparativos para las votaciones al Soviet Supremo, cuyos miembros podrán hacer compatibles sus escaños con sus actuales cargos y no necesariamente tendrán la dedicación exclusiva que exigían los sectores más reformistas.

Las votaciones secretas, en las que participan los casi 2.250 diputados reunidos en el Kremlin, comenzaron ayer a las 21 horas de Moscú y los resultados serán anunciados hoy.La delegación de Lituania estuvo a punto de romper la baraja parlamentaria recién estrenada cuando el profesor de música Vitautas Landherguis, uno de los líderes del Movimiento, amenazó con el boicoteo a las elecciones del Soviet Supremo, donde los diputados de la República Federativa Rusa deciden finalmente sobre la composición de las representaciones de las repúblicas, tanto en el Soviet de la Unión como en el Soviet de las Nacionalidades, las dos cámaras con 271 diputados cada una.

Para cada una de ellas había listas ya preparadas de antemano, ampliadas por la tarde después de que muchos diputados cuestionaran su confección y el sistema de cuotas territoriales que se hace extensivo al Soviet de la Unión, pese a la oposición de los sectores moscovitas más reformistas.

"El Soviet Supremo debe ser el cerebro de la nación, y no un cuerpo de embajadores de diferentes regiones", dijo a esta corresponsal el diputado y oftalmólogo Sviatoslav Fiodorov, uno de lo miembros de la delegación de Moscú.

Ésta había presentado, a modo de ejemplo, una lista de 55 nombres, -todos ellos debatidos y todos ellos dispuestos a abandonar su trabajo y dedicarse en exclusiva al trabajo político- para 29 puestos reservados a la capital en el Soviet de la Unión.

En otros lugares, como en la república asiática de Uzbekistán, las listas de candidatos estaban formadas por las máximas autoridades locales.

A propósito de autoridades locales, el jefe del Partido en Leningrado, Soloviov, que fue derrotado en las elecciones, estaba sentado entre los miembros del Politburó en la sala del Palacio de Congresos ayer.

La delimitación de funciones entre los dos parlamentos soviéticos -el Congreso y el Soviet Supremo- será estudiada por una comisión especial y Gorbachov opinó que no hay que apresurarse en ello.

Por el momento, y de acuerdo con las enmiendas constitucionales de noviembre de 1988, el Soviet Supremo es un Parlamento más influyente e importante que el Congreso, aunque ambos son interdependientes. Diputados corno Andrei Sajarov o Fedor Burlatski han querido que el Congreso fuera el verdadero Parlamento y el Soviet Supremo su órgano de trabajo.

Sin embargo, esta idea no prosperó ayer como no lo había hecho ninguna de las propuestas de modificación constitucional, pese a ser esa una de las competencias del Congreso.

Diputados liberados

El analista político Fiodor Burlatski se enfrentó ayer a Gorbachov al proponer que el Soviet Supremo estuviera "integramente" formado por diputados liberados. Gorbachov abogaba a favor de que la dedicación exclusiva fuera solo "como norma".

Burlatski tuvo que insistir para que ambas cosas se sometieran a votación. Gorbachov levantó ostentosamente su boletín a la hora de defender su propuesta que recibió 1.412 votos a favor, en tanto que la de Burlatski obtenía 636 votos.

Para reforzar su posición, Gorbachov invocó la Constitución, un documento considerado como un instrumento de trabajo temporal para la reforma política y que ahora es utilizada como corsé para ella.

El respeto al marco constitucional, parte de un conjunto de propuestas del Presidium, fue aprobado por inmensa mayoría, con 72 votos en contra y 63 abstenciones.

Gorbachov consiguió también excluir al fiscal Telman Gdlian de la lista de candidatos para la cuota de la república federativa rusa en el Soviet de las Nacionalidades (11 puestos), sometiendo a votación dos listas, una preparada antes del Congreso con 12 nombres, y otra con 20 nombres, entre los cuales estaba Gdlian.

El líder arregló en un momento el asunto, después de que Vitali Vorotnikov, presidente del presidium del Soviet supremo de la república rusa, fuera incapaz solucionarlo.

De nuevo, Gorbachov dijo estar detrás de la primera lista "consensuada, reflexionada" y 726 diputados en total votaron a su favor, mientras la segunda obtuvo 262 votos.

En las relaciones sometidas a votación se metieron ayer por la tarde algunos nuevos candidatos, como Alexandr Abalenski, que pasará a la historia como el hombre que se atrevió a competir con Gorbachov por la presidencia, el fiscal Nikolai Ivanov, miembro del equipo de Gdlian, o Genrik Pogosian, el primer secretario de la región de Nagorno-Karabaj.

Libre voluntad

Las papeletas recién impresas que recibían anoche los diputados permitían a todos ellos expresar su voluntad en cada una de las listas de cada una de las repúblicas.

Así por ejemplo, cada uno de los 403 diputados territoriales de la república federativa rusa en el Congreso tiene derecho a tachar nombres de la lista de candidatos de Estonia, por ejemplo, hasta dejar los 2 que le corresponden en el Soviet de la Unión.

Lo mismo pueden hacer, los 4 diputados territoriales estonianos para dejar los 146 puestos que corresponden a la mayor república de la Unión Soviética en el Soviet de la Unión.