_
_
_
_
EL FUTURO DE LA "PERESTROIKA"

La CIA certifica el retraso de la economía soviética

La economía de la URSS crecerá con modestia, incluso en la mejor de las hipótesis para el líder soviético, Mijail Gorbachov, y no podrá alcanzar a sus rivales del Oeste de aquí a finales de siglo, según un informe de la Agencia Central de Inteligencia norteamericana (CIA) presentado ante el comité económico de la OTAN. El texto, que acaba de ser desclasificado, se presentará hoy a la Prensa en la delegación norteamericana ante la organización de defensa occidental.

Más información
Gorbachov facilita que Eltsin vuelva, del 'destierro'
Bogomolov: "El mercado único alarma al CAME"

Basado en la última versión del modelo econométrico Sovsim (simulación soviética) elaborado por la CIA para evaluar y efectuar previsiones sobre la economía de la URSS el informe baraja tres hipótesis: una que prevé un fracaso de Gorbachov, otra intermedia y una tercera y última en la que su política tiene éxito.Los resultados que arrojan se diferencian muy poco. Incluso en el guión que prevé un triunfo de Gorbachov, el crecimiento del Producto Nacional Bruto (PNB) a lo largo del período 1986-2000 es tan sólo del 2,6% anual.

Posible acelerón

Esta proyección estima que, tras unos años de desordenes achacables a la introducción de las reformas y en los que el crecimiento sería el 1,9%, la expansión económica se aceleraría hasta rondar el 3% en la última década del siglo. Incluso en este caso, el crecimiento sería inferior a las previsiones del 4% o 5% que baraja el actual plan quinquenal (1986-1990) y a las estimaciones oficiales a más largo plazo.

"Los avances tecnológicos y la mejora de la productividad laboral", señala el informe, "no bastarán para acortar distancias con el Oeste durante la última etapa de este siglo. Incluso en el guión mas favorable no hay garantía de que en un futuro previsible los soviéticos dispongan de una tecnología industrial equiparable a la del Oeste".

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Las otras dos hipótesis son aún mas pesimistas. La intermedia se fundamenta en una tímida aplicación de las reformas, aguadas por los pactos políticos, la planificación y el control centralizado de los precios. Como en este caso no se producen desórdenes al intentar aplicarla, la URSS consigue mantener a finales de esta década un crecimiento notable (2,3%) que se viene abajo en los años noventa (1,5%). La media hasta el año 2.000 sería del 1,8%.

La peor de las hipótesis prevé una derrota de la perestroika, pero no por eso Gorbachov logra evitar la desorganización provocada por los intentos de asentarla que tienen lugar a finales de este década. Durante estos años, el crecimiento disminuye hasta un 1,9% y en los noventa se acentúa la tendencia a la baja hasta situarse en 1,6%. La media hasta el año 2.000 sería del 1,7%. Todos estos porcentajes pueden sufrir ligeros retoques en función de los resultados de la agricultura, de la que la economía soviética sigue siendo muy dependiente.

Cualquiera que sea la evolución de este sector, el informe vaticina que "la URSS será cada vez más incapaz de satisfacer la demanda de un mejor abastecimiento alimenticio sin recurrir a sustanciales importaciones pagadas en divisas" A corto plazo el objetivo modesto del actual plan quinquenal (con un crecimiento del 2,7 %), sólo se logrará si se cumplen tres condiciones: carencia de sobresaltos climáticos entre 1918 y 1990, crecimiento de las aportaciones tecnológicas de los demás sectores a la agricultura a un ritmo similar al de los últimos a los (4%), e incremento de la productividad en al menos un 1%, por encima del nivel necesario para compensar pérdidas de puestos de trabajo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_