La epidemia de los conejos ha costado 700 millones de pesetas en pérdidas

El sector de la cunicultura industrial ha valorado las pérdidas, en las dos últimas semanas, en el territorio español, entre 700 y 800 millones de pesetas, según fuentes de la Federación Regional de Cuniculltores de Castilla y León. Este hecho, según la citada federación, ha sido ocasionado por la recesión del consumo de carne de conejo y la negativa de algunos mataderos a sacrificar animales, dado el almacenaje actual de las canales.

Todo ello está derivado en parte del temor relacionado con la aparición de una nueva patología en esta especie, denominada enfermedad vírica hemorrágica del conejo, para cuya erradicación la Subdirección General de Sanidad Animal del Ministerio de Agricultura ha puesto en marcha las pruebas de campo de una vacuna en fase de experimentación (200.000 dosis) y que "hasta el momento, aunque no se puede hablar de éxito, se ha observado que no tiene reacciones adversas", según Jesús Merchán, jefe del servicio, de Inspección Veterinaria de citado Ministerio. No obstante, la alarma en este sentido del consumidor es "infundada", según fuentes veterinarias, ya que la enfermedad no se transmite en ningún caso a la especie humana.La caída de los precios, que los criadores calculan en un 30% [unas 100 pesetas por kilo (de 255 pesetas kilo a cerca de 1150 pesetas kilo como resultado de la baja demanda puede incidir a medio plazo, de no recuperarse el sector, en la supervivencia de algunas granjas industriales "en las que muchos jóvenes han puesto sus esperanzas y sus medios económicos", según José Mendaña, miembro de la federación regional de cunicultores de Castilla y León, y presidente de la asociación leonesa.

Mendaña asegura que la incidencia de la enfermedad vírica hemorrágica del conejo en las granjas castellano-leonesas, con 122.000 hembras reproductoras, es mínima, y en la provincia de León "nula", y culpa a la Administración de la actual situación por "lavarse las manos y no dar ningún tipo de explicación sobre la enfermedad".

El consumo de carne de conejo en Castilla y León asciende a una media de 6.000 toneladas al año, con un volumen de facturación de 2.000 millones de pesetas.