Espececialidades y 'masters' de Medicina

En España el acceso a la especialidad médica se realiza a través del sistema MIR. Con este sistema se pretende formar, en lugares de garantía, un número de especialistas que se ajuste en la medida de lo posible a las necesidades futuras del país. Desde los años setenta, debido a la ausencia de una política de númerus clausus, existe un enorme colectivo de médicos en paro. El sistema MIR, dado que las necesidades de futuros especialistas -unos 3.000 al año- es menor que el número de médicos en paro -unos25.000-, garantiza la igualdad de oportunidades para acceder a dichos puestos, sometiendo a todos los aspirantes al mismo examen de conocimientos, siendo éstos el único mérito que se tiene en cuenta.La facultad de Medicina de la universidad Complutense de Madrid, "en uso de su autonomía", según reza el anuncio publicado, entre otros, por su periódico, ha convocado unos cursos que se impartirán durante el curso 1988-1989 para la obtención de nuevas titulaciones de especialista y master en las más variadas disciplinas de la Medicina, desde la Cardiología hasta la Medicina Intensiva Pediátrica. En España el tiempo que se precisa para adquirir una titulación de este tipo varía entre cuatro y cinco años a dedicación plena (62 horas semanales de trabajo: 40 de jornada laboral y el resto como atención de urgencias). Este tiempo es el que consideran necesario el Ministerio de Sanidad, el de Educación y el Consejo Nacional de Especialidades, y es muy similar al del resto de los países desarrollados del mundo. La facultad de Medicina de la universidad Complutense de Madrid ha descubierto el modo de hacerlo en uno o dos cursos académicos a razón de no más de 15 horas semanales de clases. Cuando en España se habla de la necesidad de disminuir el importante número de distintas especialidades médicas, de cara a nuestra homologación al resto de los países europeos, la facultad de Medicina se inventa nada menos que 10 especialidades y otros tantos masters.

El valor de esta titulación no está claro. ¿Para qué faculta? ¿Permitirá el ejercicio de la misma? La facultad de Medicina sabe, porque no puede alegar ignorancia y porque muchos de sus profesores son miembros de la comisión nacional de la especialidad correspondiente, que es imposible formar un cardiólogo clínico en dos años, o un especialista en oncología pediátrica en uno; entonces, ¿por qué pretende hacerlo?, ¿a quién quiere engañar? La razón de todo esto es, por supuesto, puramente económica. El mercado al que van dirigidos los cursos está formado por unos 20.000 médicos en paro que no han superado las pruebas de selección del MIR (a los que se pueden sumar en algunos cursos biólogos, veterinarios y farmacéuticos); los precios son las 125.000 a 250.000 pesetas que cuesta cada curso a cada alumno. Una sencilla multiplicación pone de manifiesto la magnitud del negocio. Los cursos son un engaño, ya que si la titulación no sirve para nada, los engañados son los que han pagado esas cantidades por algo inútil.

Sí esto se consiente, habremos retrocedido más de 20 años en el proceso necesario para garantizar la calidad de la formación de nuestros especialistas y asistiremos a la progresiva mercantilización y vaciamiento de contenido de todas las titulaciones médicas de España.

Desde estas líneas exigimos una explicación y una definición al Ministerio de Sanidad, al de Educación y al Consejo Nacional de Especialidades; emplazamos 'al decano de la facultad de Medicina de la universidad Complutense de Madrid para que explique públicamente cómo y por qué pretende llevar a cabo semejante farsa, y asimismo exigimos la promulgación de la nueva ley de Especialidades, que creemos evitará situaciones como la presente-

. Médico interno residente de la clínica Puerta de Hierro, en representación de la Coordinadora de Médicos Residentes de Madrid.