Voivodina y Kosovo, dos autonomías en peligro

H. T., Voivodina es una provincia autónoma con amplias competencias propias, asociada, al igual que Kosovo, a la República de Serbia.

Algo más del 50% de la población de Voivodina es serbia y un 18 % es húngara. Cuenta también con minorías importantes croata 31 eslovaca.

El Gobierno de esta provincia autónoma dimitió la pasada semana incapaz de resistir la presión ejercida por las manifestaciones masivas auspiciadas por Slobodan Milosevic, que cercaron en varías ocasiones los edificios públicos, tacharon de "traidores" a los dirigentes locales por oponerse al desmantelamiento de la autonomía en beneficio del poder serbio y pidieron la muerte para algunos líderes adversarios de Milosevic.

La provincia autónoma de Kosovo es, según unos, la causa, y según otros, el pretexto para las manifestaciones nacionalistas serbias.

Con un 85% de población étnicamente albanesa, esta provincia serbia logró amplias cotas de autonomía en la Constitución elaborada en 1974, atribuciones que Milosevic quiere eliminar ahora.

Con el más alto índice de natalidad de toda Europa, los albaneses de Kosovo ejercen, según los dirigentes de Serbia, presiones que llegan a la violencia sobre las minorías serbia y montenegrina para que abandonen la provincia y ésta pase a ser netamente albanesa.

Milosevic ve una estrategia albanesa separatista de "terrorismo y nacionalismo" para arrebatar a Serbia un territorio históricamente serbio. Es sede del patriarcado de la Iglesia ortodoxa serbia.

La pobreza existente en Kosovo es tremenda. Miles de albaneses étnicos trabajan en el norte de Yugoslavia o el centro de Europa. Masas de jóvenes albaneses están en paro, radicalizados por lo que consideran una política represiva contra su cultura.

En el año 1968 y después de la muerte del mariscal Tito, en 1981, se produjeron graves disturbios que causaron centenares de muertos.