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La dictadura chilena prohíbe un programa del 'no' en televisión

El Consejo Nacional de Televisión, organismo controlado por adictos al régimen del general Augusto Pinochet, censuró y prohibió en la noche del lunes la emisión de los 15 minutos de propaganda a favor del no en el plebiscito del 5 de octubre. La ley establece que cada una de las opciones del plebiscito tiene derecho a 15 minutos diarios de propaganda en todas las emisoras de televisión del país.

El motivo alegado para la prohibición fue que el programa de propaganda del no contenía unas declaraciones de René García, juez titular de la Cámara 20 de lo Penal de Santiago. En las declaraciones, tomadas de programas de televisión emitidos fuera de Chile, el juez denunciaba las torturas que sufren los presos en las mazmorras de la Central Nacional de Investigaciones (CNI), la policía política del régimen.El mismo día en que, con motivo del 161º aniversario del diario El Mercurio de Valparaíso, Pinochet pronunció en la ciudad portuaria un discurso en el que dijo: "La libertad de Prensa es la base y apoyo de todas las demás libertades públicas", funcionarios adictos a su persona censuraron y prohibieron la propaganda del no en televisión.

El presidente democristiano y portavoz del Comando por el No, Patricio Aylwin, anunció durante una entrevista en el Canal 13, de la universidad Católica, que el Consejo Nacional de Televisión había tratado de suprimir un pasaje de la propaganda del no para la noche del lunes. A la hora prevista empezó la llamada Franja electoral, que esa noche comenzó con la propaganda del sí. Según lo estipulado, el turno cambia cada noche: una vez comienza con la película del y la noche siguiente abre el programa la del no.

Decisión de Pinochet

El ministro de la presidencia, Orlando Poblete, anunció ayer al mediodía que el general Pinochet había ordenado, "por razones de justicia y equidad", que se renunciara a transmitir ayer los 15 minutos de propaganda a favor del sí, "para restablecer asi la igualdad de oportunidades".La primera semana de propaganda electoral había sido muy favorable al no. La calidad de las películas, su estructura y hasta cierto aire cocacolesco daban frescura a la propaganda del no. La del sí parecía anclada en mostrar los horrores del Gobierno de la Unidad Popular y disimular al máximo la candidatura de Pinochet, que apenas aparece un minuto de los 15 que dura la película. El lunes se emitió primero la película del sí, que había mejorado considerablemente la calidad de los días anteriores. Al llegar el momento de la película del no salió un texto que anunciaba la prohibición. En algunos barrios de Santiago se escucharon cacerolazos, que los vecinos organizaron de forma espontánea para protestar contra la censura.

El régimen parece no haber digerido la incipiente libertad en televisión. A este medio, la oposición no había tenido acceso en los 15 años de dictadura. El cuarto de hora de propaganda del no permitió por primera vez difundir el mensaje opositor. Las acusaciones de torturas contra la CNI parecen haber resultado demasiado para el régimen. El juez García decía en la película prohibida que en su tribunal ha conocido múltiples casos de tortura: "Pasan de 50 personas. Todas ellas fueron torturadas en la CNI. Está debidamente establecido en los procesos: que han sido detenidas por agentes de la CNI, que han sido torturadas por agentes de la CNI, en cuarteles de la CNI. Hay personas que pasan sesiones de tortura inacabables, que duran un día entero, continúan toda la noche hasta las tres o las cuatro de la madrugada, hora en que tiran al hombre como un trasto inútil en un camastro en su celda. Le dejan descansar unas cuantas horas, para volver otra vez". [El obispo auxiliar de Santiago, Sergio Valech, presentó ayer un recurso de queja contra del fiscal militar, coronel Femando Torres, por investigaciones que tachó de "abiertamente arbitrarias y abusivas". Torres tiene a su cargo la investigación del atentado contra Pinochet, de septiembre de 1986, informa Efe].

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