Nombrada una 'ombudswoman' para las prostitutas de Amsterdam

Una ombudswoman tratará de mejorar la situación de las prostitutas latinoamericanas que trabajan en Amsterdam, según una resolución adoptada por el consistorio de la capital holandesa. La elegida, que debe hablar español y estar familiarizada con la asistencia social, empezará a trabajar el próximo 1 de septiembre en el distrito rojo y en los clubs dedicados a la prostitución, y contará con el apoyo de un equipo de abogados, médicos y psicólogos que se está formando.El ayuntamiento de Amsterdam ha dispuesto también exigir una licencia a los dueños de locales nocturnos y de las ventanas de la zona roja, que les obligará a mejorar sus instalaciones.

De las cinco candidatas a ocupar el cargo de ombudswoman, dos son latinoamericanas y trabajan ya en la zona, y otras son asistentes sociales y miembros de organizaciones cristianas. La escogida, tendrá que enfrentarse con los problemas derivados de la trata de blancas, la falta de información sobre el SIDA y las malas condiciones de vida de unas mujeres latinoamericanas, aisladas por una barrera lingüística, y que viven a veces hacinadas en la misma habitación donde trabajan.

"No será una labor inocente sino peligrosa, y la policía tendrá que proteger a la ombudswoman", dice Dita Vermeulen, responsable en Arnsterdam del departamento municipal destinado a la emancipación de la mujer. "Sólo en el distrito rojo hay unas 200 prostitutas provenientes de América Latina, pero desconocemos las cifras de los clubs o los pisos particulares. Buena parte de ellas fueron traídas a Holanda por la fuerza, pero otras llegaron para ayudar a sus familias. Ya no son jóvenes, y éstas últimas envían casi todos sus ingresos a sus países de origen.

Transportar cocaína

Otras eran correos que transportaban cocaína y se quedaron atrapadas en un círculo peligroso y difícil de abandonar. A veces trabajan para un chulo, y el departamento de Dita Vermeulen quiere investigar también sus actuaciones. "En más de una ocasión, han tenido que esconderse para evitar represalias tras haberlos denunciado. Por otra parte, más del 50% de las latinoamericanas poseen pasaporte holandés tras un matrimonio arreglado, y así es dificil ayudarles o reconocer su situación".Sólo las prostitutas holandesas que trabajan en Amsterdam son independientes. Por este motivo, han surgido en ocasiones problemas con las extranjeras, que vienen también de Asia y Africa, y que ofrecen los mismos servicios por menos dinero, o son menos reacias a evitar el uso de preservativos.

La segunda fase del proyecto municipal consistirá en exigir una licencia a los dueños de locales y ventanas dedicados a la prostitución en la ciudad. Sin ella, no podrán mantenerlos abiertos o inaugurar otros nuevos, y tendrán que ofrecer en todos las mismas garantías de higiene y seguridad obligadas en los locales de la ciudad.