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La URSS celebra hoy la primera subasta de arte de su historia

Pilar Bonet

Dieciocho obras de la vanguardia de los primeros años de la Revolución y cuadros de 34 artistas soviéticos contemporáneos componen el lote artístico por el que se puja hoy en Moscú en la primera subasta internacional de arte de la historia de la URSS.La subasta, organizada por la firma británica Sotheby's y el Ministerio de Cultura de la URS S, supone la culminación de un proceso en el que han convergido un enfoque más comercial de los responsables culturales de la URSS y un auge del interés occidental por el arte soviético actual.

La sección histórica de vanguardia incluye obras de Alexander Rodchenko, Bárbara Stepanova, Alexander Drevin, Nadezhda Udaltsova y María Ender. La muestra ha sido reunida en colecciones familiares privadas de Moscú y el precio de salida más alto corresponde al lienzo de Rodchenko Línea, que data de 1920 y está valorado entre 15.650.000 y 20 millones de pesetas.

En la sección contemporánea hay trabajos de llia Kavakov (el pintor soviético actual más cotizado en el extranjero), Iván Chulkov, Nikolai Filatov, VIadimir Nemujin, Leonid Púrigin, Eduard Steinberg y VIadimir Yankilevski. Altos precios de salida tienen los cuadros de Ilia Glazunov, pintor especializado en temas históricos rusos, dos de cuyas telas, La leyenda de la ciudad de Kitege e Iván el Terrible, alcanzan 6.125.000 pesetas. El acuerdo suscrito entre el Ministerio de Cultura de la URSS y la empresa Sotheby's contempla la entrega a los artistas de un 10% del precio de adjudicación en libras esterlinas más un 50% del mismo en rublos. El resto se distribuye entre Sotheby's (un 8%) y el ministerio (30%).

La subasta ha sido precedida de una exposición itinerante que ha circulado desde Nueva York hasta Zúrich pasando por Londres, París y Colonia.

Una parte de los artistas participantes tuvieron dificultades en el pasado porque sus obras no se ajustaban a los cánones del realismo socialista, abandonado ahora en la práctica. La política cultural de Gorbachov ha promovido en los últimos años la salida de estos artistas al extranjero y las relaciones con los circuitos artísticos internacionales. Sergei Jorochilov, representante del Ministerio de Cultura, subrayó ayer la falta de experiencia de los museos soviéticos en los circuitos comerciales internacionales y manifestó que uno de los fines de la perestroika, en el terreno cultural, es la creación de un mercado interior de arte.

Por otra parte, un revuelo se produjo el martes en una sala de exposiciones de Moscú, donde debía inaugurarse una muestra de una asociación artística adscrita a la Unión de Artistas de la URSS. Los organizadores exigían la retirada de tres obras, una de las cuales presentaba las fotos del autor, Sergel Mironenko, como si de una campaña electoral se tratara, con un texto en el que podía leerse: "Primer Candidato Libre al puesto de Presidente de la URSS. ¡Canallas, en qué habéis transformado el país!".

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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