Varios alcaldes, jueces y ejecutivos, intoxicados en un restaurante de Marbella

Unas 35 personas, entre las que se encuentran los alcaldes de Marbella, Estepona y Ronda, el delegado provincial de Turismo de Málaga y los dos jueces de Primera Instancia de Fuengirola, resultaron intoxicadas por ingerir mayonesa en mal estado en el restaurante de lujo La Dorada, de Marbella. La intoxicación por salmonella se produjo el pasado 6 de mayo, aunque su alcance no ha trascendido hasta ahora por la ausencia de denuncias y de una investigación epidemiológica.

Numerosas personas de los grupos intoxicados tuvieron que ser hospitalizados con fuertes vómitos, fiebre de 40 grados sostenida, erupciones cutáneas y dolores musculares. En varios casos este cuadro clínico fue calificado como grave, y aun después de 12 días de la intoxicación siguen recibiendo medicación.El primer grupo de afectados coincidió con una comida de la Compañía Telefónica, de 21 personas, en la que estaban los alcaldes, el delegado de Turismo, directivos provinciales de la compañía y periodistas. Los sintomas aparecieron entre las 12 y las 24 horas siguientes, afectando especialmente al delegado comarcal, José Nieto, al subdirector comercial, Andrés Sáinz y a un chófer, que han estado más de una semana en cama.

Un grupo de empresarios de Neguri también se vio afectado y de 12 personas enfermaron las seis que tomaron mayonesa: tres de ellos, con carácter grave, necesitaron ser ingresados en centros hospitalarios de Marbella y Bilbao. También almorzaron en el restaurante siete personas que celebraban la apertura de un negocio de maquinaria de jardinería, y enfermaron cinco de ellos, de los que dos tuvieron que ser ingresados en hospitales de Madrid.

La intoxicación afectó a otro grupo de siete personas, en el que se encontraban los dos jueces de primera instancia de Fuengirola, y el farmacéutico titular Enrique Portales, que fue el único que denunció el hecho ante las autoridades sanitarias, el domingo 8 de mayo.

Varios afectados han señalado su intención de presentar denuncias sanitarias y judiciales contra el restaurante, y han destacado el pésimo tratamiento recibido del mismo. Al comunicarle la intoxicación, arguyeron que era "imposible" que eso ocurriera en un restaurante de lujo.