El nuevo código genético permitirá comprender muchas enfermedades
Científicos norteamericanos han hecho público, después de muchos años de trabajo, lo que ellos consideran descubrimiento de un nuevo código genético responsable de la elaboración de la materia viva y, por tanto, esencial para el organismo.
Los autores de este descubrimiento, los doctores Paul Schimmel y Ya-Ming Hou del departamento de Biología del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), han afirmado que el nuevo código genético permitirá comprender cómo apareció la materia viva sobre la tierra y ayudará al mismo tiempo a entender numerosas enfermedades asociadas a las dificultades de transcripción del ADN (Acido desoxirribonucléico).Los expertos han dejado constancia del descubrimiento en un trabajo conjunto publicado en el último número de la revista científica especializada británica Nature. El nuevo código es más rudimentario que el sistema ya conocido que se desarrolla en el nivel de la célula; cumple también un papel esencial en el funcionamiento de la maquinaria viva del organismo. Permite por otra parte seleccionar los elementos que se han de juntar para formar las proteínas de acuerdo con una orden dada por el primer código genético expresado en el ADN
"Es un descubrimiento maravilloso y fundamental", dijo el doctor Schimmel, "natural e ingenioso que podrá utilizarse también para la construcción de ordenadores biológicos o para aplicaciones relacionadas con la inteligencia artificial".
Cadena ADN
Desde los años sesenta los científicos conocen el código genético del ADN, una doble cadena de moléculas, en forma de hélice que registran, como una memoria de ordenador los datos relativos al organismo vivo que deben organizar y dar vida a las células.El ADN, que contiene en definitiva una serie de instrucciones químicas, ordena a las sustancias situadas en sus proximidades encadenarse de una forma concreta. Esto sucede en una extraña danza de formas y de energía ya que todos los compuestos químicos en presencia tienen terminaciones con formas y niveles energéticos precisos que interaccionan sólamente con otros elementos preseleccíonados.
Al desdoblarse el ADN se forma lo que podría ser una copia inversa o ARN mensajero (ácido ribonucléico) que va a servir de plano. Los obreros son los otros agentes químicos (ARN de transferencia), producidos para elegir correctamente entre la veintena de substancias presentes en la célula.
El ARN de transferencia se encarga por una parte de entrar en contacto con los aminoácidos y por la otra ayuda a reconocer el plano del ARN mensajero. El misterio está en saber cómo el ARN de transferencia puede ser equipado con una buena malla de aminoácidos en función de lo que se había depositado sobre el ARN mensajero.
En fin, el mensaje de reconocimiento del aminoácido por el ARN de transferencia se inscribe sobre él. Es la presencia y la posición precisa de las dos instrucciones la que determina la forma final de la malla.
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