Una corona de Pinochet
Una corona enviada por el presidente de Chile, general Augusto Pinochet, y otra de la Federación Nacional de Excombatientes presidían el vestíbulo de la vivienda de la esposa del anterior jefe del Estado. En el cuarto piso del número 8 de la calle de los Hermanos Bécquer se encontraba la capilla ardiente de Carmen Polo, en una pequeña habitación de la vivienda.Cuadros de frailes y una bendición de Pío XII, que recibió en 1947 del Papa, decoraban las paredes del cuarto donde se encontraba el ataúd que contenía el cuerpo sin vida de la viuda de Franco.
Sus familiares, entre ellos el marqués de Villaverde, recibían las condolencias del público que acudió a despedir y ver por última vez a Carmen Polo. La mayoría de los asistentes observaba por reducido espacio de tiempo el cadáver de la viuda de Franco y se despedía santiguándose y con genuflexiones.
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