La misión de la ONU concluye su visita al Sáhara

Mobamed Abdelaziz, presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y secretario general del Frente Polisario, estrechó el martes la mano a los miembros de la delegación técnica de las Naciones Unidas y de la Organización para la Unidad Africana (OUA) en un refugio militar subterráneo en el valle de Erni, apenas a 20 kilómetros de distancia del cuarto muro marroquí, en los territorios saharauis bajo control del Frente Polisario.

Este encuentro selló el final de la visita de la misión encargada de recabar datos sobre el conflicto del Sáhara occidental con vistas a la celebración de un referéndum.En el bunker saharaui, el jefe de la misión, Abderrahim Sarah, expresó su agradecimiento al secretario general del Polisario por la "calurosa acogida" dada por sus gentes a la delegación, que regresó ayer a Nueva York. Por su parte, Abdelaziz reiteró su llamamiento a la comunidad internacional, y en especial a España, para que presionen sobre Marruecos para el logro de la solución del conflicto.

Abdelaziz ofreció un té en el bunker a la delegación técnica, entrada ya la noche, tras un recorrido a través de los territorios liberados del norte de la RASD, que en dos días ha cubierto unos 1.200 kilómetros a partir de la localidad argelina de Tinduf. Para cubrir esta parte del programa la delegación viajó en una comitiva de 15 vehículos todo terreno bajo la escolta militar del Frente Polisario, que garantizaba así su seguridad ante eventuales ataques marroquíes.

A pesar de la tregua declarada unilateralmente por el Frente Polisario coincidiendo con el desarrollo de los trabajos de la comisión, según fuentes saharauis, el pasado viernes -día de la llegada de los funcionarios internacionales a Tinduf- se produjeron varios heridos, algunos de ellos de gravedad, en un ataque marroquí en el sector de Farsia.

En esta segunda parte del itinerario de la misión del lado saharaui -el primero se desarrolló a lo largo de 600 kilómetros por los territorios liberados situados en la frontera con Mauritania-, la misión se encontró con miembros de la Yernaa (asamblea de notables en los tiempos de la Administración colonial española), prisioneros marroquíes y testimonios para apoyar las denuncias saharauis referentes a la violación de los derechos humanos por parte de las autoridades de Rabat en los territorios ocupados por los marroquíes.

El presidente de la RASD se mostró satisfecho ante el desarrollo de los trabajos de la misión y reiteró el "deseo de independencia y libertad" expresado por las comunidades de refugiados en territorio argelino, así como de las poblaciones nómadas saharauis (únicos habitantes junto a las fuerzas militares) del Polisario de los territorios liberados de la RASD a lo largo del periplo de la comitiva de técnicos y la Prensa internacional.

Maniobra equívoca de Hassan

Abdelaziz reconoció que las afirmaciones del monarca marroquí respecto a unas eventuales negociacíones con el Frente Polisario suponen un "giro dentro del lenguaje del rey Hassan" respecto al conflicto. Sin embargo, el dirigente saharaui subrayó que este paso se limita a una maniobra equívoca mientras el rey Hassan mantenga su exigencia de que las negociaciones sean posteriores al referéndum y no anteriores al mismo, como pide el Frente Polisario. En este sentido, Abdelaziz reiteró su deseo de que se celebre un referéndum en el Sáhara occidental, cuyas garantías de credibilidad, en su opinión, sólo se pueden dar tras una retirada de las "tropas de ocupación y Administración marroquíes" de estos territorios.

En cuanto a las relaciones con España, Abdelaziz afirmó que actualmente existen "contactos a distintos niveles" entre Madrid y el Frente Polisario y calificó este diálogo de "positivo y constructivo". El líder saharaui reiteró su deseo de que España desarrolle "un papel más positivo" en el proceso para el logro de la autodeterminación saharaui. "España", dijo, "a diferencia de otros países, posee un conocimiento profundo de la situación e histo fia del pueblo saharaui debido a su experiencia como ex potencia colonial y su situación de fronte ra con la RASD desde las islas Canarias". Según el dirigente sa haraui, "a partir de estos hechos, al Gobierno español le corresponde un papel importante en la recolección de datos sobre la población. saharaui". En su opinián, la aportación española puede ser "muy útil" para hacer frente al "falseamiento del censo" efectaa do por Rabat en el Sáhara occidental.