La ausencia del rey Fahd hipoteca la 'cumbre' árabe

El rey Fahd de Arabia Saudí no va a acudir a la cumbre árabe extraordinaria que el próximo domingo se reúne en Amman, según anunció a última hora del martes la agencia oficial de noticias saudí, SPA, sin dar más explicaciones. La ausencia del rey Fahd supone un duro golpe para los esfuerzos del monarca jordano de lograr una posición unánime árabe contra Irán.

Se trata del tercer líder árabe que anuncia su inasistencia a la cumbre -tachada de "traición" por Irán- y convocada por el rey Hussein de Jordania para fraguar una postura árabe común sobre la forma de acabar con la guerra que desde hace más de siete años libran Irán e Irak.El primer ministro interino de Líbano, Salim Hoss, anunció ayer su inasistencia, debido al "peligro que planea" sobre su país. El máximo dirigente libio, coronel Muammar el Gaddafi, manifestó inesperadamente el pasado lunes que boicotearía la reunión porque había sido "dictada por los norteamericanos y convocada específicamente para combatir a Irán y defender los intereses de Estados Unidos en el golfo Pérsico".

Frente a la díscola Libia, Arabia Saudí ha defendido una postura firme contra Irán, y los observadores esperaban que, incluso, solicitara a los países árabes la ruptura de relaciones diplomáticas, idea que ya fue sugerida por los saudíes durante la última reunión de ministros de Asuntos Exteriores del Consejo de Cooperación del Golfo, el pasado octubre en Riad. El propio rey Fahd -que estará representado en Ammán por el príncipe heredero Abdula ben Abdelaziz- manifestó días atrás, en una reunión del consejo de ministros, que confiaba en que la cumbre produjera resultados positivos.

Hassan II de Marruecos, sin embargo, se declaraba "pesimista" respecto a los posibles logros, en una entrevista publicada ayer por el diario kuwaití Al Siyasa (La Política). "La actual situación es la peor en la historia del mundo árabe", manifestó.

Irán afirma haber derribado otro caza iraquí, mientras Irak informó de que sus aviones bombardearon ayer la terminal iraní de Jarg y a dos petroleros, uno de lo cuales estaba en Jarg.

Irán celebraba ayer el Día de la Muerte de Estados Unidos, aniversario de la toma de la embajada norteamericana en Teherán en 1979, con multitudinarias manifestaciones antinorteamericanas. Dos personas murieron y 26 resultaron heridas al estallar una bomba entre los manifestantes.

Ayer, también, se confirmó la muerte el pasado domingo de un tripulante indio, de 26 años, a bordo de un pesquero del emirato de Sharja, atacada por una fragata norteamericana, que la confundió con una lancha iraní.