Reencuentro en Cuenca de varios artistas que integraron el grupo El Paso
Gran parte de los artistas vivos que integraron el grupo El Paso se han reunido en Cuenca en torno a un seminario de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, que conmemora el 30º aniversario del nacimiento del que fue en su día el más controvertido e internacional grupo estético español. El pintor Antonio Saura, redactor del célebre manifiesto de El Paso y uno de sus fundadores, dirige este reencuentro que se disolverá el viernes.
Existe una mitificación histórica de El Paso, porque el grupo ha pasado a ocupar un capítulo de la historia del arte de vanguardia en España que, según Saura, conviene contrastar con lo que fue la realidad del colectivo cuando surgió y durante los tres años que permaneció más o menos cohesionado. A ello se refirió el pintor en su conferencia de apertura del seminario.Saura considera que determinadas posturas estéticas y de acción que se plantearon entonces han recobrado vigencia como soluciones esclarecedoras, dada la gran crisis estética internacional que a su juicio existe en estos momentos. Entiende que los artistas y críticos reunidos en Cuenca estos días deben profundizar sobre la necesidad de "recuperar el internacionalismo que tuvo El Paso preservando el centro o núcleo nacional".
Existe un malentendido que según Saura preocupa a los artistas implicados. Se trata de las motivaciones que propiciaron el surgimiento del grupo, y que hay que hacer converger con la coyuntura social, política, cultural y económica de la época en que nació, hace ahora 30 años.
Aquellos momentos fueron calificados por Manuel Conde, conferenciante en la misma jornada, de estériles. La creación de El Paso, según el crítico, supuso una toma de conciencia y un grito de protesta que consiguió una proyección internacional del único colectivo de artistas de la vanguardia española que tuvo un significado y espacio relevantes. Hasta entonces sólo algunos eventos esporádicos promovidos por Eugenio D'Ors, como la Escuela de Crítica de Madrid y el Salón de los Once, dirigidos a una elite, tuvieron alguna relevancia, aunque nunca alcanzaran, ni antes ni después, la proyección internacional de El Paso.
Los gestos de El Paso pueden parecer hoy ingenuos, comentaba Saura, pero en el contexto de aquella época fueron de una gran valentía, y ahora pueden volver a adquirir validez, aunque, tal como dijo el pintor, exista la creencia ce que para que un grupo artístico resulte válido sea preciso que se dé un estado represivo que favorezca la eclosión a contracorriente, cosa errónea, en su opinión.
En el seminario, organizado a base de conferencias matinales y mesas redondas vespertinas, intervienen artistas como Rafael Canogar, Martín Chirino y Antonio Fernández Alba, José Ayllón y Manuel Rivera; el director del MEAC, Pedro San Cristóbal, y críticos de arte como Guy Scarpetta, Valeriano Bozal, Juan Manuel Bonet, Antonio Urrutia y el propio Manuel Conde, entre otros. Todos echan en falta a los desaparecidos Manuel Miralles, Pablo Serrano y Manuel Viola. Los congregados alternarán sus intervenciones en el Museo de Cuenca con visitas y "claustro" en el Museo de Arte Abstracto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.