Una esperanza para Doñana

Un año después de que decenas de miles de aves acuáticas murieran en Doñana, 2.000 folios de diligencias esperan en el Juzgado número 14 de Sevilla como consecuencia de las denuncias interpuestas por posibles delitos ecológicos. Un nuevo director conservador, de 27 años de edad, ha impuesto un nuevo estilo en la gestión de Doñana: ha comenzado por establecerse en el parque para trabajar. Los análisis realizados a algunas aves todavía arrojan muestras de productos prohibidos, como organoclorados, si bien en proporciones despreciables.

Todos coinciden en señalar que las cosas están mejor que antes y que han disminuido en gran medida las fricciones entre organismos e instituciones con competencias en el parque. A pesar de todo, los ecologistas insisten en que es preciso "reducir más el uso de pesticidas y de algunos productos de los que todavía se usan en la agricultura de la zona", y los responsables de la estación biológica siguen criticando el Plan Almonte, que a su juicio no beneficia al parque por el uso que hace de las aguas.En muestras realizadas por el propio Icona sobre aves acuáticas se siguen detectando restos de productos organoclorados, cuyo uso está prohibido y a los que se atribuye la mayor responsabilidad de la muerte masiva de aves, que fueron entre 10.000 y 25.000, según las fuentes. Aunque la proporción en que se han hallado estas muestras es prácticamente inofensiva, los análisis demuestran que aún se siguen utilizando estos productos prohibidos.

Para Javier Castroviejo, director de la estación biológica de Doñana, sigue siendo "desordenado el uso que se hace del agua subterránea y superficial", lo que supone "un riesgo serio para el parque".

Según Castroviejo, podría ocurrir que el parque se secara desde fuera si se abusa del agua, ya que podría bajar el nivel freático de la zona parque con el riesgo de desecación de las marismas. El científico asegura también que en el preparque, dentro del Plan Almonte, se han arado cauces públicos y que las extracciones de agua en esta zona deberían paralizarse.

Castroviejo reprocha también al Instituo Andaluz para la Reforma Agraria (£ARA) que haya autorizado tres cacerías de aves acuáticas, realizadas los días 9, 16 y 30 del mes pasado, "para defender los arrozales". Según los datos de Castroviejo, en estas tres batidas se abatieron unos 1.650 ejemplares.

La mesa del director

Jesús Casas es ingeniero de montes y tiene 27 años, que le suponen ser el más joven de todos los directores conservadores de parques naturales del país.También es el director más joven que haya tenido Doñana, parque que gestiona desde el pasado mes de abril. La catástrofe ecológica del final del verano de 1986, de la que la opinión pública tuvo conocimiento casi un mes después de que se produjera, puso de manifiesto las fricciones y la falta de colaboración de las distintas administraciones y organismos con competencias en el parque.

Cuando Jesús Casas llegó a Doñana lo primero que preguntó fue dónde estaba su mesa. "¿Mesa? ¿Qué mesa?", le contestaron. En el parque "era costumbre" que el director conservador no tuviera mesa. La mesa, si acaso, tenía que estar en Sevilla con el resto de las dependencias administrativas de Doñana. Casas se empeñó en tener una mesa y un teléfono en el mismo parque, porque, como él mismo explica, "500 millones [presupuesto anual de Doñana] no se pueden administrar debajo de un pino".

Por eso, cuando llegó para encargarse de la gestión del parque -medio año después del envenenamiento de aves-, no pudo evitar "cierta sensación de orfandad". Hoy todo es distinto: una de las cabañas de guarda forestal de la zona del Acebuche ha sido reformada y acondicionada para alojar las oficinas de la dirección, donde llegan a trabajar hasta 25 personas.

En cuanto a fricciones entre la estación biológica de Doñana y el Icona, Casas asegura no haberlas observado. Además, según asegura, de haberlas, se solucionan llamando por teléfono. Por su parte, Javier Castroviejo, director de la mencionada estación, asegura que las relaciones con el instituto son correctas.

Complejo de 'boy scout'

Para Casas, la Administración es el elemento encargado de "posibilitar que las cosas funcionen". De ahí que cuando esta primavera se produjo la última mortandad de aves, habitual en esta época del año, cuando el calor degrada las aguas estancadas y mueren muchas crías todavía jóvenes, Casas llevó un exhaustivo cómputo diario de las 4.400 aves que perecieron en las 50.000 hectáreas de parque, para lo cual llegó a tener a 72 personas peinando algunos lucios donde el agua aún tenía cierta profundidad. En opinión de Casas, "hay que perder el complejo de boy scout. En la conservación se necesitan profesionales".En la estantería del despacho del director de Doñana reposa un juguete que imita a las máquinas demoledoras que se emplean en la construcción. "Me lo regalaron mis compañeros de Daimiel [Casas fue director conservador de las tablas de Daimiel antes de hacerse cargo de Doñana] durante la comida que me ofrecieron de despedida". "Eres como una máquina que no deja de empujar", le dijeron, y él se muestra orgulloso.